En Medellín “influencers” estarían pagando a niños por grabarlos consumiendo drogas

Menores de edad afirmaron que creadores de contenido les dan dinero a cambio de aparecer en sus videos

Guardar

Nuevo

La periodista Steph Bates estuvo en uno "olla" de Medellín - crédito @StephBatesPress/X

Medellín ha sido noticia nacional en diferentes ocasiones de manera negativa por los casos de explotación sexual de menores que han sido denunciados en los últimos meses; de la misma forma, concejales han indicado que las zonas de drogadicción han aumentado en la capital antioqueña.

A pesar de que esto ha sido desmentido por el alcalde Federico Gutiérrez, en redes sociales han sido expuestos videos en los que se observa como hay espacios que estarían bajo el control de las estructuras criminales, en estos, hay múltiples consumidores de droga, incluyendo menores de edad.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

Es por ello que la periodista colombo-americana Steph Bates ingresó a uno de estos expendios de droga para conocer cómo son los lugares conocidos como “ollas”.

En uno de los primeros videos publicados por la comunicadora, expuso que había presencia de menores de edad sin que las autoridades intervinieran, incluyendo testimonios de algunos de ellos y de trabajadoras sexuales.

“Cincuenta, sesenta o hasta cien mil pesos, me siento mal porque no son esos hombres con los que quiero estar. Es verdad (consume drogas antes de tener relaciones con sus clientes), o si no no sería capaz de estar con nadie”, declaró una de estas mujeres.

Steph Bates expuso la denuncia que le hizo un menor en la capital antioqueña - crédito @StephBatesPress/X
Steph Bates expuso la denuncia que le hizo un menor en la capital antioqueña - crédito @StephBatesPress/X

Creadores de contenido estarían aprovechándose de los menores de edad

Además de los casos de explotación sexual, Bates reveló que habría un accionar que no ha sido identificado ni juzgado por las autoridades, este sería protagonizado por influenciadores, que en su afán de lograr reproducciones, estarían pagando a menores de edad adictos a las drogas por aparecer en sus videos.

Dos niños afirmaron a la periodista que han recibido dinero a cambio de consumir frente a las cámaras de los creadores de contenido, que durante las grabaciones prometen ayudarlos a salir de sus adicciones, pero luego desaparecen.

Sí, ellos nos dan plata por grabarnos, que hagamos cosas y ya, al otro día, no nos botan… En el último video me dieron $120.000 peso, consumiendo pegante”, destacó uno de los menores.

Otro menor afirmó que el dinero que le pagó un creador de contenido lo utilizó para “para pagar pieza y ya, luego, el consumo”, lo que generó el enojo de la comunicadora, que pidió que las autoridades no permitan que este tipo de hechos se repitan.

Steph Bates recorrió una de las "ollas" más peligrosas de Medellín  - crédito @StephBatesPress/X/VivirenelPoblado
Steph Bates recorrió una de las "ollas" más peligrosas de Medellín - crédito @StephBatesPress/X/VivirenelPoblado

Conversando con un sujeto que pertenece a una fundación, Bates preguntó por qué se ha normalizado este tipo de prácticas, a lo que él indicó que es una de las consecuencias de que los menores no son conscientes de su adicción.

Cuando ya los niños son adictos, están a la merced de todo, los influencers aprovechan esto y pagan a los niños, entrevistan a los niños, hacen parecer que los están ayudando”, respondió el hombre.

Sumado a ello, aseguró que las autoridades en Medellín han descuidado el cuidado a los menores, lo que hace que los creadores de contenido no tengan ningún tipo de castigo por este tipo de acciones.

“Es que Medellín se descuidó muchísimo con sus niños, no respetan a las autoridades, un influencer pasa muy fácil por encima de ellos”.

La exposición de esta denuncia, que se hizo viral en redes sociales, hizo que varios usuarios destacaran las problemáticas que se registran en Medellín mientras no hay ningún tipo de intervención por parte del Estado o las autoridades.

Me parte el corazón esta realidad. Un niño de 13 años es un niño. No es posible que esté solo en la calle consumiendo”, “Además de población indígena, sin ley, con menores de edad de día y de noche, en más calles, en situación de mendicidad” o “Pero Fico muestra que todo está bien, esta es la verdadera realidad de la ciudad”, son algunos de los comentarios en los videos publicados por la comunicadora.

Guardar

Nuevo