En la mañana del miércoles 17 de julio se conoció un video en que aparecen, entre otros, alias Calarcá y alias Andrey, leyendo un texto en contra de alias Iván Mordisco, principal jefe del Estado Mayor Central (EMC), una de las disidencias de las Farc. Lo critican por demostrar, según ellos, tener más pretensiones de guerra que de paz.
Los insurgentes que allí aparecen mantienen un cese al fuego con el Gobierno, tal como lo confirmó en las últimas horas el ministro de Defensa.
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“Ya le ha preguntado al pueblo su real consentimiento, si quieren una confrontación armada en estos territorios? Y todo por el egocentrismo que no le permite ver con claridad lo que implica llevar a jóvenes a morir a una guerra sin necesidad. Todo en su afán por mostrar ante Colombia y el mundo un poder y control que no existe. En resumen, dejamos constancia histórica ante el pueblo colombiano que no hemos sido nosotros los que están propiciando una guerra entre hermanos de lucha en estos departamentos. Por el contrario, hemos evitado a toda costa un derramamiento de sangre sin ningún objetivo, y seguimos expresando nuestra voluntad de diálogo ante las diferencias que se presentan al interior de nuestra organización”, señalan.
Sin apoyo y sin comandantes, Estado va detrás de ‘Iván Mordisco’
Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, jefe de las disidencias que se hacen llamar Estado Mayor Central (EMC), se encuentra bajo intensa vigilancia de las agencias de inteligencia desde hace varias semanas.
La decisión del Gobierno nacional de no continuar con el cese al fuego fue el guiño que necesitaba la fuerza pública para iniciar con una persecución intensiva contra el máximo líder de esa disidencia. De hecho, según un informe revelado por El Tiempo, las Fuerzas Especiales han adoptado una misión crucial para neutralizar a Iván Mordisco en un plazo de 45 días por mandato del presidente Gustavo Petro.
“Hace 15 días lo captamos tomando tinto al pie de una embarcación que iba a abordar”, aseguró un alto oficial al diario nacional, sin revelar detalles de su ubicación para no entorpecer los trabajos de inteligencia. Sin embargo, fuentes enteradas aseguraron que el Ejecutivo entregó la orden para que la captura o, en su defecto, la neutralización del líder disidente sea priorizada debido a sus actividades ilícitas, que incluyen extorsión y tráfico de cocaína, y su amenaza a las autoridades y al Gobierno sobre interrumpir la COP16, que se llevará a cabo en Cali.
La decisión del Gobierno de Petro surge tras la evaluación de que Mordisco abusó de la confianza que le otorgó el presidente. Un alto funcionario afirmó que este hombre “siguió extorsionando, afectando a la población civil y lucrándose del tráfico de cocaína”.
Y es que sus movimientos estarían bien estudiados, al punto de que las autoridades ya tienen analizadas las posibles rutas de escape, luego de la advertencia del ministro de Defensa. Se contempla que Mordisco esté moviéndose hacia el suroccidente, donde se encuentran sus principales aliados.
Las fuentes señalan que el jefe del EMC conoce bien cómo camuflarse en el monte y la selva, lo que complica su captura. Sin embargo, la misión para “capturarlo o darlo de baja” ya está en marcha y con avances de gran magnitud. Incluso, las Fuerzas Especiales han tenido a Mordisco en la mira a una distancia de 160 metros, pero no pudieron actuar debido a los protocolos sobre el cese del fuego bilateral, que establecían que las tropas debían “romper contacto” cuando estuviera protegido por la población civil.
Este 16 de julio, el Gobierno ordenó a la fuerza pública arremeter contra Mordisco y sus estructuras, cambiando así la estrategia. Las fuentes confirmaron a El Tiempo que “Mordisco sabe que pronto lo ubicaremos” y se encuentra extremadamente nervioso, evitando pasar la noche en un mismo lugar.
Los equipos de inteligencia aseguraron que la vigilancia sobre Néstor Gregorio Vera Fernández se ha intensificado, ya que podría buscar replegarse en zonas controladas por los frentes Jaime Martínez, Carlos Patiño y Dagoberto Ramos, en el suroccidente del país, donde existe un conflicto abierto con la fuerza pública, a pesar de que alias Calarcá, jefe disidente que se mantiene en el cese del fuego, se ha distanciado de Mordisco.