Gracias a la oportuna denuncia y la acción operativa de las autoridades, se logró dar con la captura de un sujeto señalado de extorsionar a varios comerciantes de Bogotá. De acuerdo con la información obtenida, el delincuente se hacía pasar como integrante de una reconocida organización terrorista para obtener el dinero de sus víctimas con mayor facilidad.
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El hombre responsable de sembrar el terror en los comerciantes es un ciudadano de nacionalidad venezolana que se hacía pasar por un grupo residual de las extintas guerrillas de las Farc, concretamente por la Segunda Marquetalia, y así logró intimidar a varios dueños de negocios en la capital.
El extranjero fue detenido gracias a la valentía y suspicacia de un comerciante que, al detectar una extrañeza en su acento, decidió denunciarlo ante el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI). Con la intervención del Gaula de la Policía, se gestionó una reunión para el supuesto pago de una extorsión en el municipio de Viotá, Cundinamarca, donde finalmente fue capturado el ciudadano venezolano.
El extranjero, que usaba WhatsApp para cobrar las millonarias ‘vacunas’, ahora deberá responder ante las autoridades por el delito de extorsión agravada.
En otro caso similar, en el departamento de Huila, un sujeto que se hacía pasar por integrante de una organización paramilitar fue capturado en flagrancia cuando intentaba intimidar, al parecer, a varios comerciantes de Neiva. El sujeto, identificado como Luis Carlos Carmona, y quien había salido hace dos semanas de prisión tras cumplir una condena por extorsión, fue sorprendido cuando fotografiaba al menos 20 fachadas de negocios de potenciales víctimas.
De acuerdo con la investigación, Carmona les pedía a sus víctimas entre 2 y 3 millones de pesos por extorsión. El delincuente tenía la intención de reunir 60 millones de pesos. El hombre que había estado capturado hace algunas semanas por extorsión deberá nuevamente a afrontar consecuencias por el delito de tentativa de extorsión agravada.
Finalmente concluyó el comandante del Batallón de Artillería de Campaña N.° 9 Tenerife, teniente coronel Edwin Uribe León, la importancia de la participación ciudadano para denunciar estos hechos delictivos que afectan la seguridad de la región: “La denuncia oportuna es fundamental para identificar, capturar y judicializar a estos delincuentes que pretenden generar zozobra y afectar la tranquilidad de la región”.
En caso de ser víctima de una extorsión en Colombia, se recomienda seguir los siguientes pasos: En primer lugar, es fundamental mantener la calma. No actuar de manera impulsiva es clave para poder pensar y actuar con claridad. Mantener la serenidad permitirá tomar decisiones más acertadas en esta situación.
En segundo lugar, no se debe realizar ningún pago exigido por el extorsionista sin asesoría. Los pagos pueden perpetuar el comportamiento delictivo y generar mayores riesgos. Es importante no ceder a estas demandas sin consultar con las autoridades.
Es crucial documentar todas las comunicaciones recibidas del extorsionista. Guardar mensajes, correos electrónicos y grabar llamadas si es posible. Esta evidencia será vital para la investigación y posterior acción de las autoridades.
Evitar confrontar al extorsionista es una medida de seguridad. No intentar enfrentar o amenazar al extorsionista, ya que esto podría incrementar el riesgo para la seguridad personal y de los allegados.
Notificar inmediatamente a las autoridades competentes es esencial. Se debe comunicar con el Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (Gaula) de la Policía Nacional llamando a la línea directa 165. Los profesionales están capacitados para manejar este tipo de situaciones.
Seguir las instrucciones policiales es vital. Colaborar plenamente con las estrategias y medidas que brinden las autoridades asegurará una resolución segura del caso. La coordinación con los cuerpos de seguridad es determinante en estos casos.
Finalmente, considerar buscar apoyo psicológico es recomendable para manejar el estrés y la ansiedad derivados de la situación de extorsión. Recibir asistencia psicológica ayudará a afrontar mejor el proceso y las posibles repercusiones emocionales.
Denunciar de manera rápida y efectiva es crucial para que las autoridades puedan intervenir adecuadamente, proteger a las víctimas y perseguir a los responsables.