Detonaron un artefacto explosivo en el suroccidente de Bogotá, por fortuna, sin producir heridos

La onda explosiva afectó ventanales y fachadas de viviendas en el barrio Villa Nelly, de la localidad de Kennedy

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Bajo la luz artificial, la
Bajo la luz artificial, la cinta policial amarilla delimita un escenario nocturno enigmático. La fusión entre la oscuridad y el amarillo crea una atmósfera misteriosa. - (Imagen ilustrativa Infobae)

Durante las primeras horas de este martes 16 de julio, en el sector de Villa Nelly, en la localidad de Kennedy, suroccidente de la capital colombiana, fueron víctimas de la detonación de un artefacto explosivo.

El hecho de violencia ocurrió a la medianoche en inmediaciones de una vivienda que se ubica en la carrera 81 con calle 42 sur, donde criminales abandonaron el paquete, que luego produjo un gran estruendo en ese tradicional sector, informaron en la emisora Blu Radio.

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Agregaron que un atentado similar ocurrió durante el fin de semana en el mismo sector, por lo que los residentes del barrio están implorando apoyo a las autoridades ante el temor de que sigan ocurriendo hechos de la misma naturaleza.

La Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog) confirmó que, por fortuna, luego de que el artefacto fuera detonado, no se tuvo registro de personas heridas, aunque sí daños materiales en los ventanales de algunas de las edificaciones de la zona, al acudir al lugar, tras el reporte de la comunidad.

“A través de la línea de emergencia 123 se da a conocer un hecho de una explosión en la localidad de Kennedy (...) No tenemos personas lesionadas solo hay afectación algunas viviendas alrededor”, señaló el coronel Leonardo Bernal, el oficial de Inspección de turno.

El uniformado indicó que luego de conocerse el ataque en contra del sector, se iniciaron las indagaciones correspondientes para dar con los delincuentes que lo perpetraron.

“La Mebog ha dispuesto un grupo de policía judicial, de inteligencia, y el cuerpo técnico de antiexplosivos para determinar el modo, tiempo y lugar de este suceso. Ya tenemos también un grupo que está verificando la videovigilancia del sector con el fin de esclarecer a los responsables o el responsable de este suceso”, destacó Bernal.

(Crédito: Policía Metropolitana de Bogotá)

Desalentador balance de la violencia en Bogotá tras la final de la Copa América

Cuatro personas resultaron muertas en medio de las 108 riñas por hora que registraron durante la madrugada del lunes 15 de julio, luego del partido entre Colombia y Argentina por la final del torneo continental.

Las víctimas mortales se reportaron tras riñas en las vías públicas de las localidades de Bosa, Suba, Engativá y Rafael Uribe Uribe, mientras que otras 26 personas resultaron heridas en enfrentamientos por intolerancia entre ciudadanos, destacaron en el informativo de la televisión bogotana Citynoticias.

Además, se impusieron 192 comparendos por poner en peligro la vida de ciudadanos, 15 más por riñas, 118 por portar armas cortopunzantes, 12 por falta de respeto a las autoridades, 10 sellamientos y 37 personas fueron llevadas al Centro de Traslado por Protección, la antigua UPJ (Unidad Permanente de Justicia), según el balance proporcionado por Citynoticias.

El comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog), el general José Daniel Gualdrón, indicó que durante la jornada ‘post-partido’ se incautaron tres armas de fuego y 180 cortopunzantes, en medio de las 1.322 riñas en las que intervinieron los uniformados, de acuerdo con lo señalado en Noticias Caracol.

“Esos hechos de intolerancia fueron atendidos con los equipos ‘antirriñas’ y evitamos resultados más negativos. Fueron generadas por el consumo de licor y en algunos casos por consumo de estupefacientes, pero en cuanto a lo que se presenta al cierre de un fin de semana, estamos dentro del balance de dos o tres homicidios”, agregó el alto oficial en ese noticiero.

En el noticiero bogotano también informaron que entre las 6 de la tarde del domingo y las 5 de la mañana del lunes se registraron 9.865 llamadas a la línea 123, de las cuales 5.625, o sea el 57 %, fueron denuncias por hechos contrarios a la convivencia, el 24 % por riñas, el 13 % por lesiones personales y un 2 % por hurtos.

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