Pelas en la tribuna y colados en el estadio de la final, ¿realmente los colombianos tendemos al caos?: esto dicen los especialistas

La imágenes viralizadas en redes sociales muestra la falta de cultura ciudadana por parte de algunos aficionados

Guardar

Nuevo

Hinchas de ambos equipos protagonizaron la trifulca con el fin de entrar al estadio, la mayoría sin boleto - crédito Colprensa
Hinchas de ambos equipos protagonizaron la trifulca con el fin de entrar al estadio, la mayoría sin boleto - crédito Colprensa

El esperado enfrentamiento entre Argentina y Colombia por la Copa América 2024 no solo estuvo marcado por la intensidad en el campo, sino también por un caos que casi desbarata el evento desde sus cimientos. Antes del pitazo inicial en el estadio Hard Rock de Miami, Estados Unidos, videos e imágenes inundaron las redes sociales mostrando a hinchas de ambos equipos desafiando las normas, saltando mallas y tratando de ingresar sin boletas.

Este episodio no es aislado y refleja un fenómeno arraigado en la región: la creencia de que se puede desafiar al sistema sin consecuencias. Situaciones similares se observan diariamente en el transporte público, donde colarse es una práctica común, o en el uso ilegal de servicios como electricidad e internet. Es el reflejo de una sociedad donde el respeto por las normas parece haber cedido terreno frente a la búsqueda de gratificaciones inmediatas.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

Hincha de Colombia detenido por la policía de Miami - crédito Colprensa
Hincha de Colombia detenido por la policía de Miami - crédito Colprensa

El desorden antes del partido no solo provocó un retraso de 80 minutos, como señaló el director técnico de Colombia, Néstor Lorenzo, sino que también afectó el estado físico y emocional de los jugadores. “La tensión se siente más cuando no se tiene experiencia en estos eventos”, admitió Lorenzo, subrayando las repercusiones negativas en el rendimiento deportivo.

Más allá de los impactos deportivos y logísticos, surge una pregunta crucial: ¿hasta cuándo la sociedad va a normalizar el desacato a las normas? Por eso, expertos como Carlos Charry, PhD en sociología, identifican esta actitud como un síntoma de la debilidad institucional y de la percepción de impunidad que prevalece en muchas sociedades latinoamericanas. Según Charry, la “cultura del atajo” permite a muchos sentir que pueden vulnerar las normas sin enfrentar consecuencias, aprovechando la debilidad de los estados y de los sistemas de justicia.

Martín Caparrós, reconocido periodista argentino, también ha abordado este tema en su obra “Ñamérica”, destacando cómo el oportunismo y la búsqueda de soluciones rápidas son características arraigadas en la región. El incidente en la Copa América, donde algunos intentaron ingresar al estadio por los ductos del aire acondicionado, ejemplifica esta mentalidad de encontrar el camino más corto, aunque implique cometer actos ilegales.

Cultura de los hinchas del fútbol en la final de la Copa América deja mucho en qué reflexionar

El saltarse la norma, sea cual sea, hace referencia al desarrollo moral individual y social - crédito @U_itrews/X
El saltarse la norma, sea cual sea, hace referencia al desarrollo moral individual y social - crédito @U_itrews/X

Un claro ejemplo de esto se vivió durante la final de la Eurocopa de 2020 entre Inglaterra e Italia en el estadio de Wembley, donde cientos de hinchas intentaron ingresar al estadio de manera ilegal y algunos incluso se enfrentaron a las fuerzas de seguridad. Este incidente quedó registrado en el reciente documental de Netflix, “The Final: Attack on Wembley”, revelando la gravedad del problema de seguridad y la tensión emocional desatada por un evento deportivo.

El psicólogo Santiago Eduardo Herrera Díaz, docente de la Facultad de Psicología de la Universidad CES, analiza estos comportamientos desde una perspectiva sociocultural más amplia. “El saltarse la norma, sea cual sea, hace referencia al desarrollo moral individual y social”, señala, sugiriendo que estos incidentes no se limitan al ámbito futbolístico, sino que reflejan un fenómeno más amplio en la sociedad contemporánea donde el cumplimiento de las normas parece ceder terreno ante un individualismo exacerbado.

Lo futbolístico y la emocionalidad van de la mano, pero pasa en otros ámbitos en los que se ha inculcado que en la sociedad se tiene derecho a todo - crédito Colprensa
Lo futbolístico y la emocionalidad van de la mano, pero pasa en otros ámbitos en los que se ha inculcado que en la sociedad se tiene derecho a todo - crédito Colprensa

En el contexto de la Copa América, la final disputada en Miami también estuvo marcada por intentos de hinchas por ingresar al estadio de manera irregular. Esto plantea interrogantes sobre la responsabilidad organizativa y la seguridad en eventos masivos, subrayando la necesidad de medidas efectivas para prevenir incidentes similares en el futuro.

El debate sobre la cultura de los hinchas del fútbol y sus implicaciones va más allá de los resultados de un partido; es un llamado a reflexionar sobre cómo la pasión puede transformarse en comportamientos que desafían las normas establecidas, afectando la convivencia y la seguridad pública.

Guardar

Nuevo