Domiciliario de Rappi se negó a entregar un pedido por una rabieta, aseguró usuaria: “Me dijo que tenía un 1 minuto para bajar”

A pesar de haber estado frente a frente, el sujeto decidió marcharse y dejar a la usuaria de la aplicación “viendo un chispero”

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Los vecinos de la denunciante tuvieron que intervenir - crédito Edgard Garrido / Reuters
Los vecinos de la denunciante tuvieron que intervenir - crédito Edgard Garrido / Reuters

Los inconvenientes con la plataforma de delivery Rappi parecen haberse convertido en pan de cada día para quienes siguen confiando su hora del almuerzo, lista del mercado y otros favores a los domiciliarios o rappitenderos. Cuenta de ello, la denuncia realizada por la estudiante de medicina y creadora de contenido, Sofía Molina.

Había pedido un regalo, de esos que se programan, y la entrega estaba programada para las 7:00 de la noche. Efectivamente, siendo las 7:00 p. m. me llamaron para decirme que el repartidor ya estaba en la portería principal”, dijo la mujer, agregando que le pareció algo extraño, ya que, por lo general, las entregas se realizan en la segunda portería de donde vive.

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Estando más cerca de su apartamento, Molina le pidió al rappitendero que caminara hasta la portería mientras bajaba, pero este se negó, argumentando que se trataba de un pedido de restaurante y no podía dejarlo en la segunda portería. Molina calificó esto como una mentira, debido a que en ocasiones anteriores ya había recibido domicilios en el punto que estaba referenciando.

Le dije que no había problema y que iba abajando, pero el Rappi les contestó que si no llegaba en un minuto iba a cancelar el pedido. Entonces salí de inmediato, pero el Rappi fue bastante grosero, había dicho que se iba y lo iba a cancelar”, expresó la joven.

Por mensaje, el domiciliario amenazó con denunciarla por supuesto maltrato - crédito @Sofiamolinac19 / TikTok

Pero esto jamás sucedió. El domiciliario dejó la portería y nunca canceló el pedido, así que Molina le reclamó, debido a que, si no realizaba la cancelación, ella no recibiría su dinero de regreso y perdería tanto el pedido como lo invertido en el regalo. Tras varios minutos, logró persuadirlo de volver, en medio de mentiras que el domiciliario estaba utilizando para escudarse, como que los vigilantes querían que fuera hasta el apartamento de los Molina, cuando, en realidad, no pueden pasar de la portería, y que habían sido groseros con él, cuando las quejas de otros residentes apuntaban en su contra.

“Me dijo que lo estaba tratando de ladrón y que no iba a dejar que nadie le faltara el respeto, no quería entregarme nada y me dijo que solucionara por mi cuenta para que me devolviera la plata”, aseguró Molina.

Pero tal fue la insistencia de la mujer que sus vecinos decidieron involucrarse en la discusión, lo que provocó que el repartidor se marchara. Sin embargo, como si no fuera suficiente, empezó a amenazarla vía mensajes:

Me dijo que lo habíamos maltratado, que iba a comunicarse con soporte, que no me iba a entregar nada y que yo iba a perder mi plata. De verdad, qué rabia que las cosas tengan que pasar de esta manera, porque una vez estábamos frente a frente no me quiso entregar mi pedido. Me quedé yo sin el regalo, me quedé sin la plata y Rappi no contesta”, dijo Molina.

Activista también se quejó de la plataforma tras hacer un mercado que no lograron llevarle por ser “demasiado grande”

De no enviar a alguien más, Joseph habría perdido su dinero - crédito @Call_Me_Joseph / TikTok

Días antes, la plataforma de domicilios Rappi enfrentó críticas tras no poder entregar un pedido de gran tamaño al disponer en su mayoría de motos, según denunció el creador de contenido Joseph, conocido en redes como Call me Joseph.

El incidente se produjo cuando Joseph realizó una compra de más de 700,000 pesos que incluía productos como dos pacas de leche, dos bolsas de pan, yogures, frutas y verduras. El hombre explicó que el problema surgió cuando Rappi asignó a un repartidor en moto, a pesar de que el volumen del pedido superaba las capacidades del vehículo.

“Me facturaron sin ningún problema y, al poco tiempo, me escribe el chico que estaba haciendo el mercado y me pregunta: Oye, ¿Cómo pretendes que yo lleve todo esto en una moto?”, expresó Joseph.

De cancelar el pedido, Joseph habría perdido todo el dinero, ya que el mercado estaba listo - crédito @call_me_joseph_ / X
De cancelar el pedido, Joseph habría perdido todo el dinero, ya que el mercado estaba listo - crédito @call_me_joseph_ / X

El área de soporte de Rappi no ofreció soluciones adecuadas para la entrega. Según Joseph, le propusieron descuentos, el seguimiento del pedido o la cancelación sin reembolso. Así que, indignado, decidió utilizar un servicio de Uber para recoger la compra y advirtió a otros usuarios sobre este tipo de inconvenientes a través de sus redes sociales.

“Señores de Rappi, este mercado ni siquiera era para mi casa. Este mercado va para un proyecto social y con eso no se juega”, afirmó Joseph, que, además, mencionó que buscaría otro proveedor en el futuro debido a esta experiencia.

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