El jueves 11 de julio, la Policía Metropolitana de Cúcuta capturó a dos personas que presuntamente hicieron parte de la fuerza pública y que pasaron a ser parte de la organización criminal Clan del Golfo. De acuerdo con El Tiempo, el operativo se llevó a cabo en tres casas del sector de Atalaya, en las urbanizaciones Luis David Flórez y Colinas del Norte, en Cúcuta (Norte de Santander).
Los dos exuniformados que fueron detenidos por las autoridades son el exsubintendente de la Policía Nacional Wladimir Lobo Rodríguez y el cabo primero retirado del Ejército Nacional Jarly Quintero Contreras, conocido por sus alias Azul o Rojo.
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Según detalló la Unidad Investigativa del medio, el cabo primero (r) cumplió funciones en el Batallón de Apoyo y Servicio para el Combate No. 1 “Cacique Tundama”, en Tunja (Boyacá). Asimismo, destacó por ser experto en formación de varios uniformados que esperaban llegar a ser cabos segundos o sargentos segundos. En su experiencia también se añade su experticia en la capacitación de enfermeros para el combate.
Sin embargo, sus conocimientos pasaron a ser relevantes para el grupo armado. Pues, el exmilitar presuntamente cumplió con la responsabilidad de adquirir el material bélico que era destinado al Clan del Golfo: armas y municiones. Uno de los abogados de alias Azul aseguró que desconocía sobre la captura del exmilitar al que alguna vez representó en un único proceso.
Ahora bien, el trabajo logístico, al parecer, era llevado a cabo por el expolicía que también fue capturado. De acuerdo con el informativo, suministraba material de guerra y elementos que son de uso privativo de las Fuerzas Militares.
En el operativo en el que fueron capturados ambos antiguos uniformados, las autoridades incautaron cinco celulares, seis armas de fuego y 49 cartuchos de diferentes calibres. Con este armamento, presuntamente, los detenidos también habrían adelantado homicidios selectivos y cobros de extorsiones en el departamento. Asimismo, estarían involucrados en el tráfico de drogas.
El Clan del Golfo ha recibido varios golpes gracias a las investigaciones y operativos de las autoridades. El 13 de julio de 2024, por ejemplo, las Fuerzas Militares informaron a través de un comunicado sobre el arresto de uno de los líderes del grupo criminal en Barrancabermeja (Santander).
Se trata de alias Cicatriz, presunto cabecilla detenido en un operativo adelantado por tropas del Gaula Militar Santander, en coordinación con la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación. El trabajo de inteligencia que llevó a la captura del hombre armado tardó seis meses en desarrollarse.
Cicatriz, de 22 años, habría acumulado aproximadamente nueve años dentro de la organización criminal subestructura Édgar Madrid Benjumea. Según las investigaciones, sería responsable de administrar los fondos obtenidos mediante extorsiones a comerciantes y coordinar homicidios en las localidades de Barrancabermeja, Puerto Wilches y San Pablo, en el sur del departamento de Bolívar.
A lo largo de sus años en la organización, se le atribuye la ejecución de varios delitos graves. Entre ellos, destaca su posible implicación en el asesinato de una mujer en Puerto Wilches el pasado 27 de junio. Además, se le imputa la coordinación de múltiples homicidios en la región. El detenido fue puesto a disposición de la autoridad judicial correspondiente y deberá responder por los cargos de porte, tráfico y fabricación de armas de fuego, así como por homicidio agravado.
No obstante, a pesar del trabajo de los investigadores y de las autoridades, la organización criminal continúa fortaleciéndose, tanto así, que el mismo presidente Gustavo Petro ordenó impedir su expansión. “El Clan del Golfo tiene que dejar de extorsionar a la población, está creciendo y hay que actuar de inmediato. No quiero ver en esos procesos de investigación oficiales de la fuerza pública en convivencia con el crimen, es lo peor que nos puede pasar”, dijo el primer mandatario en mayo de 2024 en un evento público.