Le dispararon cinco veces frente a un local de comidas rápidas: todo quedó en video

En la tarde del miércoles 10 de julio, se registró un nuevo atentado sicarial en Bucaramanga, que dejó como saldo una persona muerta.

Los hechos se presentaron en la vía que comunica al puente Provenza con la Plaza Salitre del barrio Asturias, en el sur de la ciudad. Un hombre en motocicleta se convirtió en la víctima del acto violento.

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De acuerdo con lo que pudo detallar Vanguardia, hacia las 3:00 p. m., el occiso, identificado como Edgar Benjamín Vera Diaz y que vestía pantalones cortos, camisa del Atlético Bucaramanga y tenis, se encontraba justo al frente de un establecimiento de comidas rápidas cuando fue interceptado por los sicarios que le dispararon en cinco ocasiones.

“Escuchamos los disparos y los sicarios huyeron. No se ve quién es la persona, incluso quedó con el casco puesto”, indicó uno de los testigos del hecho, reseñado por el medio citado.

Por los hechos no hubo personas capturadas, ni se ha divulgado un comunicado oficial por parte de las autoridades. Entre tanto, Unidades del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación, junto con la Sijín, adelantaron las labores de levantamiento del cadáver.

Según lo indicado por El Tiempo, Vera Díaz tenía antecedentes por hurto, porte de armas de fuego y venta de estupefacientes.

Al atentado sicarial contra Edgar Benjamín Vera Diaz se suma el ocurrido en la noche del 5 de julio, en el barrio Cabecera de Bucaramanga, en el que Óscar Daniel Robayo Silva, de 31 años, fue asesinado mientras estaba acompañado de otras dos personas que resultaron heridas: Aldair Arturo Turizo Velandia, de 25 años, y Laura Camila Cuadros, de 24 años.

Según revelaron las autoridades, en el vehículo en el que se movilizaba la víctima se encontraron 61 bolsas con drogas, entre ellas tusi y cocaína. Además, indicaron que Robayo Silva tenía un arma traumática y varios cartuchos en su poder.

Asimismo, investigaciones revelaron que la víctima tenía antecedentes por su participación en organizaciones criminales, lo que ha llevado a considerar un posible ajuste de cuentas entre bandas delincuenciales como una de las hipótesis del caso. Robayo Silva había sido arrestado en múltiples ocasiones, pero gozaba del beneficio de prisión domiciliaria.

El 8 de julio, el alcalde Jaime Andrés Beltrán se pronunció sobre el caso a través de su cuenta de X (antes Twitter), criticando al Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) por permitir que personas con antecedentes graves reciban beneficios de casa por cárcel, pues se conoció que Robayo Silva tenía antecedentes por lesiones personales, porte de armas y tráfico de estupefacientes, lo que según Beltrán, no debería haberle permitido obtener dicho beneficio.

Beltrán también coordinó con representantes judiciales para examinar casos similares, destacando la necesidad de una revisión exhaustiva de las medidas de prisión domiciliaria. “Nos reunimos con representantes del sector judicial para analizar casos puntuales como este, en los cuales peligrosos delincuentes no tienen medida intramural y siguen con su actuar criminal o son asesinados como en este caso, aumentando la percepción de inseguridad en la ciudadanía”, indicó.

Además, añadió: “Hacemos el llamado respetuoso para que peligrosos criminales no se les dé beneficio de detención domiciliaria, sino que sean recluidos definitivamente en centro penitenciario”.

A propósito de las medidas correctivas contra los delincuentes en la ciudad, Beltrán recordó al Ministerio de Justicia un proyecto pendiente que espera adelantar con la llegada de la nueva ministra: “Con el Exministro de Justicia @osunanestor se avanzó en la consolidación del Centro de Detención Transitoria de #Bucaramanga, por eso, con la nueva Ministra Ángela Buitrago, esperamos continuar con este objetivo para enfrentar el hacinamiento de sindicados en nuestra ciudad, que supera el 800%”.