En medio de la oleada de violencia que se vive en el suroccidente colombiano, así como las divisiones entre las partes, inició el quinto ciclo de diálogos entre el Gobierno de Gustavo Petro y el Estado Mayor Central de las Farc (EMC).
A diferencia de otros ciclos, en este solo estarán los frentes que han manifestado su voluntad de seguir en firme en el proceso de paz, es decir, el bloque Jorge Briceño, que está a cargo por Alexander Díaz, alias Calarcá Córdoba.
Entre tanto, los frentes ubicados en los departamentos de Cauca, Nariño, Valle y Amazonía estarán ausentes en la mesa, al considerar que el presidente anunciara una ofensiva militar contra sus integrantes, lo que ha derivado en la escalada violenta en esta parte del territorio nacional.
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El jefe de la delegación de Gobierno, Camilo González Posso, manifestó que espera que en este ciclo se aborden tres asuntos clave como el respeto a la población civil, las transformaciones territoriales de las regiones y la construcción de una agenda para el fin del conflicto con este grupo armado.
“Efectivamente, los que siguen en la mesa son los frentes que están en parte de Putumayo, zonas del Caquetá, sur del Meta, Catatumbo, Magdalena Medio, sur de Bolívar y norte de Antioquia. Los que no continúan son básicamente los de Cauca, con algunos municipios vecinos del Valle y Nariño, y los de Guaviare y la zona de la Amazonía”, explicó el funcionario en declaraciones a El Espectador.
Aunque se esperaba que antes de iniciar este ciclo, se contemplaba la revisión de los informes del Mecanismo de Monitoreo y Verificación del Cese al Fuego, estos no fueron desarrollados por los recientes hechos de violencia como el ataque a militares en Valdivia, Antioquia, así como el desplazamiento de firmantes del acuerdo en Miravalle, actos que fueron rechazados por el Gobierno nacional.
Prórroga del Cese al fuego en duda
No obstante, el punto central que abarcará el cónclave entre las partes es el futuro del cese al fuego, que está vigente hasta el próximo 16 de agosto de este año, pero que se ha suspendido en los territorios mencionados anteriormente. Sin embargo, otras zonas como el departamento del Guaviare aún cumplen con el mecanismo.
González Posso señaló que, frente a la definición del cese al fuego, la última palabra la tendrá el mismo presidente Gustavo Petro, quien tendría dudas sobre su nueva extensión. “No todo incidente violento significa que deba romperse el cese al fuego, pero habrá que evaluar si existe un patrón de comportamiento, es decir, si el frente de alias Calarcá cae en una infracción sistemática del cese, podríamos adoptar una decisión como la de Cauca”, sostuvo.
Pese a que estaba previsto que este ciclo iniciara el pasado 20 de junio, este tuvo que ser aplazado hasta el 9 de julio, con el fin de que no se cruzara con la instalación de la mesa con la Segunda Marquetalia, la otra disidencia de las extintas Farc liderada por alias Iván Márquez, en Venezuela. Estos encuentros se desarrollarán en Bogotá hasta el próximo viernes 12 de julio, respectivamente.
De acuerdo con el reciente informe de la Dirección Nacional de Inteligencia, entre el 1 de marzo y el 9 de julio de 2024, se han presentado 1.237 acciones armadas en el país, de los cuales, El Estado Mayor Central ha realizado 384 ataques contra las unidades militares y la población civil, causando la muerte de 32 civiles, 15 militares y 3 policías, respectivamente.
El informe también resalta que el departamento del Cauca es el que más se ha visto afectado por el EMC, con 76 incursiones, seguido por Caquetá con 42, Antioquia con 39, Meta con 32, Nariño con 28, Arauca con 28 y Valle del Cauca con 24. “El grupo ilegal ha afectado las labores diarias de los pobladores con la activación de minas antipersona, secuestros y extorsiones” se lee en el documento.