A los colombianos ya no les alcanza para comprar pan, leche y cigarrillos en las tiendas de barrio: qué prefieren

En mayo de 2024, el gasto promedio de consumidores en tiendas de barrio en Colombia experimentó un ascenso significativo del 5,3% en comparación con el año anterior, según el último informe de Servinformación a través de su solución Servipunto. Este aumento también representó una subida del 1,8% con respecto a abril de 2024. No obstante, a nivel nacional, las ventas en valor de estas tiendas disminuyeron un 6,1% en el mismo mes, manteniendo una tendencia negativa durante todo el año.

Y es que la inflación anual acumulada hasta mayo de 2024 se ubicó en 7,16%, lo que superó así en 1,9 puntos porcentuales el incremento en el gasto promedio en tiendas de barrio para el mismo mes.

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La dinámica muestra que, pese a la reducción de la inflación en 2024, los volúmenes de venta todavía no se recuperaron debido a una persistente cautela de parte de los consumidores en los hábitos de gasto. Durante los primeros cinco meses de 2023, la inflación había alcanzado niveles del 13%, con los alimentos al registrar al 26%, factores que contribuyeron a la desaceleración de las ventas en los negocios TAT (tiendas, autoservicios y tenderos).

En términos regionales, Cali y Medellín se destacaron con los mayores aumentos en el gasto promedio, con un 4,9% y un 3,1%, respectivamente, al superar el promedio nacional. No obstante, estas ciudades experimentaron una disminución en las ventas totales, con caídas del 10,1% y el 9,2% respectivamente, comparadas con el acumulado de enero a mayo del año anterior.

La caída en las ventas se observó en múltiples categorías de productos. De las 232 categorías de consumo masivo disponibles en las tiendas de barrio, 15 representaron el 54,5% de las ventas totales. Los productos de gran consumo (PGC) constituyen el 86% de las ventas, mientras que los abarrotes a granel y perecederos representan el 14%. Las categorías que mostraron la mayor disminución de ventas en valor en mayo de 2024 fueron:

• Bebidas: -2,4%.
• Lácteos: -10,2%.
• Alimentos preparados y conservados: -6,8%.
• Pan y productos de panadería: -7,4%.
• Tabaco y accesorios para fumar/cannabis: -2,8%.

Estas cinco categorías juntas abarcaron hasta el 67,8% de las ventas de productos de gran consumo en las tiendas de barrio, evidenciando cómo la cautela en el consumo afecta profundamente a sectores esenciales del mercado.

De acuerdo con el informe, en Bogotá, las ventas de aguardiente en el periodo de enero a mayo de 2024 disminuyeron un 15,8% en valor y un 20,6% en volumen, en comparación con el año anterior. Las botellas de vidrio fueron las más afectadas, con una disminución del 20,6% en volumen, destacando las presentaciones de 375 mililitros (ml) y 750 ml que constituyen el 97,6% del volumen total de las botellas de vidrio, con caídas del 8% y el 29,2% respectivamente.

A su vez, en contraste, las ventas de ron en Bogotá también disminuyeron un 27,6% en volumen, aunque el material tetra pak mostró un crecimiento estructural, al ganar hasta 7 puntos porcentuales en 2024.

Sin embargo, el crecimiento no compensó totalmente la pérdida en volumen de las botellas de vidrio, que sufrieron una disminución del 34,1% en las presentaciones de 750 ml y 375 ml. El comportamiento evidencia una preferencia gradual de los consumidores hacia envases alternativos, aunque la recuperación en el volumen total de bebidas alcohólicas está todavía pendiente.

La mayoría de estos datos se atribuyen a diferentes dinámicas de consumo y factores económicos a nivel nacional, lo que indica una tendencia general de prudencia en el gasto de los ciudadanos colombianos, mientras el país continúa enfrentando desafíos económicos. A pesar del aumento en el gasto promedio en algunas regiones, la caída en las ventas totales y en categorías clave muestra una recuperación aún parcial y precaria del consumo en tiendas de barrio y minimercados.