En el Cerrito (Valle) tenían de mascota a una de las culebras más grandes del mundo

Se trata de una pitón de Birmania, una especie exótica proveniente del continente asiático, y que bautizaron como ‘Coqueta’

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Fotografía de archivo de una
Fotografía de archivo de una pitón. (Crédito: DAN NATUSCH)

El lunes 8 de julio, funcionarios de la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC) tuvieron que acudir a una vivienda en el municipio de Cerrito, en el norte del departamento, para recoger una especie exótica de origen asiático, una gigantesca culebra pitón de Birmania, que, al parecer, tenían de animal de compañía.

“Luego de recibir una llamada telefónica de un ciudadano en el municipio de El Cerrito, Valle del Cauca, funcionarios de la Dirección Ambiental Regional (DAR) Centro Sur de la CVC se desplazaron hasta el sitio indicado y esta persona manifestó su interés de entregar un espécimen de fauna silvestre. Los profesionales de fauna encontraron que se trataba de una pitón de Birmania (Python bivittatus) encerrada en un recipiente transparente. La llamaban Coqueta, lo que evidenció que la tenían en cautiverio como mascota”, informaron en un comunicado de la entidad.

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En el organismo de protección ambiental recordaron que se trata de un reptil que tiene la capacidad de engullir, tras asfixiarlas, a presas que pueden superarlas seis veces en tamaño gracias a sus fauces que pueden expandirse, incluso es común que se coman caimanes enteros.

Sin embargo, recordaron que se trata de animales silvestres que pueden llegar a ser muy peligrosos si están en convivencia con personas y otras especies.

“La serpiente es muy llamativa y hermosa, la ven muy exótica y por eso son deseadas como mascotas, pero al cabo de un tiempo las personas se “encartan” con estos animales de fauna y quieren entregarlos a las autoridades. Hay que entender que las necesidades y los comportamientos naturales de un animal silvestre no se pueden satisfacer en nuestros hogares y se debe tomar conciencia del sufrimiento al que lo someten”, detallaron en la CVC.

En la entidad indicaron que ese reptil puede llegar a medir hasta cinco metros de largo, por lo que se consideran de las más grandes del planeta, y se encuentran en estado natural en la India, Pakistán, Nepal e Indochina.

Ante la particular situación, en la CVC tuvieron que trasladar al animal al hogar de paso de fauna con el que cuentan en el municipio de Buga, donde le hicieron una valoración veterinaria inicial, donde establecieron que era mejor trasladarla al Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre San Emigdio donde deben determinarán los profesionales especializados si hay viabilidad y tiene las capacidades para que puedan regresarla a su entorno natural.

Una pitón de Birmania, que
Una pitón de Birmania, que tenían como mascota, fue rescatada por la CVC en el Cerrito (Valle del Cauca). (Crédito: CVC)

En la corporación reseñaron que incluso se han conocido casos donde estas culebras llegan a medir hasta “siete metros de longitud y pesar hasta 90 kilogramos, con un grosor similar al de un poste telefónico”.

El réptil, además, es capaz de nadar y estar sumergida en el agua hasta por media hora, lo que la hace un especie exitosa para poder cazar todo tipo de presas. En los inviernos, la gigantesca culebra suele hibernar en troncos huecos o debajo de rocas.

“Las hembras ponen de 12 a 36 huevos, entre marzo y abril. Envuelven los huevos con su cuerpo. Una vez nacen las crías, la pitón las abandona. El alimento en su estómago dura de 2 a 8 días. Tiene unos filosos dientes curvos para agarrar a su presa, a la vez que la asfixia, enrollándose alrededor de ella. Ostenta el récord del animal con más huesos, con un total de 872″, citaron de las increíbles características del animal salvaje.

No es la primera vez que se conocen de casos de animales exóticos traídos desde el exterior a Colombia, en 2022 fue hallado en Rionegro (Antioquia) un lobo híbrido, pero los más famosos y que son un problema en la región del Magdalena Medio, son los hipopótamos que trajo Pablo Escobar en la década de 1980 para su guarida criminal, la Hacienda Nápoles.

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