El Gobierno nacional, encabezado por el presidente Gustavo Petro, anunció la creación de una Comisión de la Verdad destinada a esclarecer los crímenes ocurridos durante el “estallido social” en el Valle del Cauca en 2021. La decisión fue confirmada por Franklin Castañeda, director de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, durante una audiencia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) sobre las vulneraciones a los derechos humanos durante el Paro Nacional.
“Aspiramos, entre este mes y el otro, culminar la concertación del mismo decreto y que esta Comisión pueda ponerse en funcionamiento (...) para que de alguna forma podamos tener una reflexión ciudadana e interinstitucional y este tipo de situaciones no se repitan muchas”, afirmó Castañeda. La comisión buscará investigar y documentar los hechos de violencia, así como identificar a los responsables de las violaciones a los derechos humanos que ocurrieron en el contexto de las protestas.
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Cabe destacar que, las protestas en Colombia comenzaron en abril de 2021 como una respuesta a una propuesta de reforma tributaria presentada por el entonces presidente Iván Duque, que buscaba aumentar los impuestos en medio de la crisis económica exacerbada por la pandemia de COVID-19. Las manifestaciones se intensificaron rápidamente, especialmente en Cali y otras ciudades del Valle del Cauca, convirtiéndose en un amplio movimiento de protesta contra la desigualdad social, la corrupción y la brutalidad policial, de acuerdo con las denuncias.
Durante mayo y junio de 2021, Cali se convirtió en el epicentro de las protestas, con miles de personas saliendo a las calles. La respuesta de las fuerzas de seguridad fue contundente, con numerosos informes de uso excesivo de la fuerza, detenciones arbitrarias, desapariciones y asesinatos.
A lo largo del Paro Nacional, se formaron múltiples mesas de diálogo entre el gobierno y los diferentes sectores de la sociedad civil, aunque muchas de las demandas de los manifestantes no fueron completamente atendidas. El impacto de las protestas fue significativo, lo que dejó un saldo considerable de muertos, heridos y detenidos, además de causar considerables daños materiales en infraestructuras públicas y privadas; sin embargo, también se lograron algunos avances, como la retirada de la reforma tributaria y la renuncia del entonces ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla.
La Comisión de la Verdad propuesta por el Gobierno de Petro tiene como objetivo principal esclarecer los hechos y brindar justicia a las víctimas de la violencia durante el “estallido social”. La comisión estará compuesta por expertos en derechos humanos, representantes de la sociedad civil y familiares de las víctimas.
¿De qué se trata una Comisión de la Verdad?
Las Comisiones de la Verdad se establecieron en diversos países como mecanismos esenciales para abordar las secuelas de conflictos y regímenes autoritarios, con el objetivo de esclarecer violaciones a los derechos humanos y construir un camino hacia la reconciliación nacional.
Estas instancias tienen la tarea de volver al pasado para resolver preguntas que permanecieron sin respuesta desde los ámbitos políticos, económicos, sociales y étnicos, siendo parte esencial del mandato de las distintas comisiones. En este proceso, se espera avanzar en el propósito de reconstruir memoria y crear mecanismos de reparación y dignificación de las víctimas, consolidando así las bases para la reconciliación y la no repetición de tales eventos.
Al indagar por los responsables, tanto colectivos como individuales, las Comisiones de la Verdad investigan las estrategias utilizadas durante los periodos de violencia y los beneficios que estas acciones trajeron a determinados sectores de la sociedad.
Este enfoque no solo permite identificar a los perpetradores, sino también entender las estructuras y dinámicas que permitieron las atrocidades, al proporcionar un contexto crucial para la historia reciente de las naciones. Además, estas comisiones abren la posibilidad de que las víctimas esclarezcan sus propias preguntas sobre la razón de los crímenes sufridos, ofreciendo un espacio para la voz y el testimonio de quienes han sido afectados directamente.