De una patada: policía trato de tumbar a motociclista que se “lució” haciendo maromas frente a un retén en carretera

Un nuevo caso de aparente “abuso policial” se ha tomado las redes sociales, luego de que diversas plataformas de denuncia compartieron el video de un joven que estuvo a punto de ser víctima de una patada, mientras iba en marcha en su motocicleta.

La peligrosa respuesta habría sido idea de un uniformado al que pasó por un costado en la carretera, donde se encontraba parqueado, al parecer, capturando a dos personas –un hombre y una mujer– para subirlos en su camioneta.

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La pieza fue captada por quien acompañaba al joven motociclista y, a lo lejos, grababa con su cámara de seguridad las maniobras que lograba exhibir, al rodar su moto en una sola llanta y colgándose de ella, sin caer al suelo.

Sin embargo, su intento por aprovechar el tramo de vía que había sido despejado por la patrulla al colocarse en el arcén salió mal; ya que, el uniformado lo habría visto como una infracción al Código de Tránsito y con tal de obligarlo a detenerse lanzó un golpe que, por suerte, logro evadir antes de continuar su camino.

Una situación que, pese a ser lamentable, se repetiría con cierta frecuencia, pues, recién en mayo (2024) en el municipio de La Plata, Huila, otro agente de tránsito detuvo de manera no convencional a una pareja de motociclistas que no atendió a su llamado.

El incidente quedó registrado en las cámaras de seguridad del sector en el que fue instalado el retén y tras ser compartido en las redes sociales dejó boquiabierto a más de uno por la falta de tacto del uniformado, pues, estuvo a punto de generar un accidente mayor.

Y es que, según se aprecia en la grabación, al caer al suelo, la parrillera estuvo a punto de golpearse la cabeza, aunque, por suerte, su espalda terminó amortiguando la caída, que no pasó de unos raspones.

Desde la Fundación Ideas para la Paz (FIP) se informó que, entre enero de 2022 y septiembre de 2023, se registraron 264 incidentes de abuso de autoridad, según lo reportado por diversos medios de comunicación. De estos casos, el 22% involucró afectaciones tanto a la Fuerza Pública como a la población civil durante operativos contra el crimen organizado y la erradicación de cultivos ilícitos, en los cuales las comunidades han denunciado patrullajes sin identificación y “falsos positivos”.

La mayor proporción de incidentes, el 78%, se refiere exclusivamente a acciones de la Fuerza Pública contra la población civil. Los departamentos más afectados fueron Bogotá, Bolívar, Magdalena, Atlántico y Valle del Cauca, donde se registraron más del 50% de los casos.

Estos hechos incluyeron detonaciones de armas de dotación que resultaron en civiles heridos o muertos, además de intervenciones durante riñas, retenes, puestos de control, manifestaciones y capturas. La FIP advirtió sobre las prácticas inadecuadas y problemas en los procedimientos operacionales de los agentes del Estado, indicando que la falta de rigidez y lineamientos claros compromete la ética y el respeto por los derechos humanos de los civiles.

Según encuestas recientes de la FIP en 35 municipios críticos, el 1% de la población reportó haber sido víctima de abuso de autoridad, con la Fuerza Pública señalada como responsable en el 70% de los casos (54% Policía y 16% Ejército). Adicionalmente, el 36% de los encuestados indicó que su municipio fue escenario de un hecho traumático en los últimos cinco años, con la Policía o militares involucrados en el 8% de estos casos. La confianza en la Fuerza Pública se mantuvo baja, no superando el 20% (16% Policía y 19% Ejército).

Desde la FIP se subraya que el uso de la fuerza debe estar regulado y no puede justificarse como una medida contra la ciudadanía, reforzando percepciones de que la población es cooptada o aliada de actividades ilegales.