Varias organizaciones de la sociedad civil han enviado una carta al presidente Gustavo Petro, instándolo a implementar criterios rigurosos y específicos en la selección de la terna para el próximo defensor del Pueblo. Entre las entidades firmantes se encuentran la Fundación Paz y Reconciliación – Pares, el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz – Indepaz, y la Pastoral Social / Cáritas Colombiana.
En su carta, las organizaciones subrayan la importancia de la Defensoría del Pueblo como el “principal órgano del Ministerio Público encargado de velar por la promoción, ejercicio y divulgación de los Derechos Humanos”. Además, enfatizan que el próximo defensor del Pueblo debe tener “un compromiso sólido y constante con la defensa y promoción de los Derechos Humanos en Colombia, así como una comprensión profunda de los mismos, reflejada en su conocimiento y experiencia”.
Las organizaciones proponen criterios como el compromiso con los Derechos Humanos, la independencia y autonomía, la integridad moral, y la sensibilidad hacia las comunidades vulnerables. Estos aspectos son cruciales según el comunicado para asegurar que la persona elegida pueda desempeñar su labor de manera efectiva y libre de influencias externas.
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El conocimiento del territorio y la situación sociopolítica de Colombia también es un criterio esencial para las organizaciones. Consideran que el nominado o nominada debe tener “un profundo conocimiento de la situación sociopolítica y los desafíos que enfrenta Colombia en este ámbito, así como el conocimiento en primera persona que genera la empatía necesaria y el saber hacer a favor de los territorios con mayores retos de vulneración de sus derechos”.
La integridad moral es otro aspecto clave que las organizaciones consideran indispensable para el cargo de defensor del Pueblo. Afirman que los nominados deben tener una hoja de vida intachable, lejos de escándalos de favoritismo, corrupción o discriminación de cualquier tipo. Este criterio es vital para garantizar que el próximo defensor pueda representar y defender adecuadamente a todas las comunidades y grupos vulnerables.
La renuncia de Carlos Camargo como defensor del Pueblo
Carlos Camargo Assis presentó su renuncia como defensor del Pueblo. La carta de renuncia fue dirigida a la Cámara de Representantes y radicada el 31 de mayo. Camargo asumió un cargo directivo en la Universidad Sergio Arboleda, donde buscará enfrentar los desafíos de la educación superior.
En el comunicado, Camargo expresó: “Quiero presentar ante la Honorable Cámara de Representantes la renuncia al cargo de defensor del Pueblo que vengo desempeñando desde el 1 de septiembre del 2020″. Indicó que su decisión se tomó gracias a la oferta académica que considera oportuna para afrontar los retos actuales en educación superior.
Carlos Camargo asumió como del Pueblo el 1 de septiembre de 2020, durante la presidencia de Iván Duque Márquez. Fue seleccionado entre una terna que también incluía a Luis Andrés Fajardo y Myriam Martínez Cárdenas. En su carta de renuncia, agradeció la confianza depositada en él y expresó gratitud a la entidad y a las comunidades atendidas durante su gestión.
El sucesor de Camargo fue Julio Luis Balanta Mina, quien ocupaba el cargo de vicedefensor y defensor delegado para asuntos étnicos. Balanta Mina es abogado especializado en Gestión Pública y Derecho Administrativo y posee una maestría en Derecho Administrativo.
Camargo explicó que desde hace varios meses recibió una oferta de la Universidad Sergio Arboleda para apoyar el fortalecimiento institucional y desarrollar proyectos académicos. Entre sus nuevos desafíos, mencionó la creación de un observatorio en derechos humanos y un doctorado en la misma área.
En cuanto a su gestión como defensor del Pueblo, Camargo se mostró satisfecho con los logros alcanzados y resaltó su compromiso con la promoción y protección de los derechos humanos desde roles académicos.
El presidente ahora debe formular una terna para elegir al próximo defensor del Pueblo de acuerdo a los problemas que se vienen presentado en el Cauca, la evidente expansión del EMC y otros grupos armados.