Bomberos buscan el cuerpo de un señor de 70 años que fue arrastrado por el río Claro en Antioquia

Rodrigo Agudelo Rincón, de 70 años, desaparecido desde el 4 de julio mientras nadaba en el río Claro, sigue siendo objeto de búsqueda por parte de distintos cuerpos de bomberos y la comunidad local en el Departamento de Antioquia. En este esfuerzo participan los bomberos voluntarios de San Luis, Puerto Triunfo, Puerto Nare y San Francisco. La operación es coordinada por el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Antioquia (Dagran).

La desaparición del señor Agudelo Rincón fue reportada por su familia alrededor de las 11:54 a. m. del mismo día. Según la información recopilada por las autoridades, el incidente ocurrió mientras nadaba en el río; después de ser arrastrado por la corriente, su cabeza volvió a emerger a la superficie unos metros más adelante antes de desaparecer nuevamente.

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Dagran solicitó apoyo adicional a otros cuerpos de bomberos, en función de sus capacidades logísticas y recursos humanos, para unirse a la búsqueda. Además, se hizo hecho un llamado a pescadores, lancheros y residentes a lo largo del río para que aporten cualquier información relevante que pueda ayudar en la localización del desaparecido.

Hasta la fecha, los esfuerzos de búsqueda no han dado resultado, pero las labores continúan intensamente, reiterando la necesidad de colaboración por parte de la comunidad.

Santiago López Urrego, un turista procedente de Medellín, se encuentra desaparecido tras ser arrastrado por una repentina corriente en La Poza, una popular zona turística en la región rural de Santa Marta. El incidente ocurrió el 6 de julio de 2024, mientras López se bañaba en compañía de otros visitantes, según relataron los testigos.

Una súbita avalancha de agua sorprendió al grupo de personas que se encontraban en el rio. Mientras que la mayoría logró salir con la ayuda de otros o por sus propios medios, López fue llevado por la corriente y no se le ha visto desde entonces. Desde ese momento, sus familiares, residentes locales y equipos de rescate han intensificado las operaciones de búsqueda en la zona y publicando información en redes sociales.

Durante los esfuerzos de búsqueda, se encontraron algunas pertenencias de López, incluyendo su mochila y ropa, que fueron identificadas por sus familiares. Las autoridades han emitido una alerta máxima, aconsejando a residentes y turistas que eviten las actividades en los ríos durante episodios de fuertes lluvias para prevenir accidentes.

Debido a las condiciones climáticas inestables en la región atlántica del país, la Secretaría de Salud Distrital de Santa Marta ha extendido la alerta amarilla hospitalaria hasta el 15 de julio. Esta medida busca garantizar una respuesta adecuada ante posibles emergencias, en consideración a las complicaciones climáticas derivadas del fenómeno de La Niña y la amenaza de nuevas ondas tropicales.

En Mutatá (Antioquia) se presentó otro caso de arrastramiento en ríos. Las autoridades suspendieron la búsqueda de Nicolás López Pérez, un niño de cuatro años que fue arrastrado por la corriente del río Mutatá el pasado 3 de junio. Tras once días de intensos esfuerzos, que involucraron a más de cuarenta personas entre profesionales y voluntarios de la zona, se decidió detener la búsqueda. Vanessa Pérez, madre del niño, también perdió la vida en el incidente.

El capitán Gustavo Navarro, comandante del cuerpo de bomberos de Mutatá, señaló que la suspensión de las labores de rescate se debe a la falta de recursos: “En este momento no contamos con el vehículo necesario, ya que está en el taller”, explicó. Este vehículo es crucial para continuar con la búsqueda, que había cubierto amplias zonas del río y sus afluentes.

La emergencia movilizó rápidamente a los equipos de rescate locales, que acudieron al lugar del río donde ocurrió el incidente. Rubén Darío Velásquez, secretario de Planeación de Mutatá, informó que habían solicitado asistencia al Dagran para mejorar las labores de búsqueda y rescate, sin éxito alguno.

Debido a la suspensión de las tareas de rescate, Manuel Vicente López, abuelo del niño desaparecido, ofreció una recompensa de tres millones de pesos a quien encuentre el cuerpo de Nicolás López.