Tras el repunte de 17% en abril, las ventas de Colombia al mundo volvieron a caer en mayo. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), las exportaciones totalizaron 4.446 millones de dólares, lo que representó una disminución de 1,1% respecto al mismo periodo del año anterior.
Hay que recordar que las exportaciones venían cayendo de manera consecutiva 13 meses atrás, en abril repuntaron y en mayo volvieron a la tendencia decreciente.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
Según la entidad estadística, lo ocurrido en mayo se debió principalmente a la caída de 3,9% en las ventas externas del grupo de combustibles y productos de las industrias extractivas. Estas totalizaron 2.130 millones de dólares en dicho mes y representan el 47,9 por ciento del valor total.
La hulla, el coque y las briquetas es lo que más bajó (-30,2%), seguido de las menas (mineral del que se puede extraer un elemento) y los desechos de metales (-42,6%). En su conjunto, estos dos grupos contribuyeron con 14,3 puntos porcentuales negativos a la variación.
Por su parte, las ventas externas del grupo de manufacturas fueron de 937,3 millones de dólares, lo que supuso una disminución de 1,3% frente a mayo del 2023. Este comportamiento se explicó principalmente por la caída en las ventas externas de los artículos manufacturados (-9,5%).
Al contrario, en mayo aumentaron las ventas externas de los productos agropecuarios, alimentos y bebidas. Estas llegaron a 1.046 millones de dólares, un 4,8% más que hace un año. Por ejemplo, las exportaciones de café tostado crecieron un 111%, las de bananos se incrementaron un 94,4% y las flores, otro 14,4%.
Respecto al grupo de otros sectores, este aumentó en mayo un leve 0,1% principalmente por el alza de las exportaciones de oro no monetario, que aportó 0,4 puntos a la variación del grupo.
Con una participación de 3,7%, Estados Unidos siguió como el principal destino de las exportaciones colombianas. Le siguieron en su orden China (9,4% del total), Panamá (8,1%), India (4,9%), México (4,0%), Ecuador (3,5%) y Chile (3,1%).
La entidad estadística indicó que la caída en las ventas externas de Países Bajos y Polonia aportó en conjunto 6,5 puntos porcentuales negativos a la variación total de las exportaciones (-1,1%).
En concreto, indicó que lo que más se dejó de enviar a Países Bajos en mayo fue el grupo de otras variedades de hulla (-84,1%) y petróleo crudo (-100,0%) en comparación con mayo del 2023.
El impacto en la economía
La caída en las exportaciones, especialmente en sectores de alta contribución económica como los combustibles, las industrias extractivas y las manufacturas, puede llevar a una reducción significativa en los ingresos del país. Menos ingresos por exportaciones afectan directamente el flujo de divisas, limitando la capacidad del país para pagar importaciones, deudas externas y mantener su estabilidad financiera.
El descenso en las ventas externas también puede provocar despidos y aumento del desempleo. Muchas empresas dependen de la demanda internacional para sostener sus operaciones y, al reducirse esta demanda, se ven forzadas a recortar personal, lo que genera un efecto negativo en el mercado laboral.
Cuando las exportaciones caen y las importaciones permanecen constantes o aumentan, el saldo de la balanza comercial puede volverse deficitario. Un déficit comercial sostenido puede elevar la deuda externa y debilitar la posición financiera del país, haciéndolo más vulnerable a choques económicos externos.
Una menor entrada de divisas puede ejercer presión sobre el tipo de cambio, llevando a una devaluación de la moneda local. Esto encarece las importaciones, aumentando los costos para consumidores y empresas, y puede también alimentar la inflación, reduciendo el poder adquisitivo de la población.
La caída de ingresos por exportaciones puede reducir la inversión pública y privada. El gobierno puede tener menos recursos para invertir en infraestructura, educación y salud, lo que afecta el desarrollo socioeconómico. Las empresas, viendo menores márgenes de ganancia y una demanda externa débil, pueden reducir o posponer sus planes de expansión e inversión.