Panamá anunció el cierre de tres pasos en el Darién por alto flujo de migrantes: EE. UU. se unió para abordar la crisis

El Gobierno de Panamá anunció el cierre de al menos tres pasos utilizados por los migrantes para cruzar el Darién, una región que marca la frontera con Colombia. La decisión, anunciada el miércoles 3 de julio de 2024, tiene como objetivo “canalizar” el flujo de migrantes y ejercer un mayor control sobre esta ruta irregular, según informaron las autoridades panameñas.

Miles de personas utilizan diariamente esta vía en su camino hacia Norteamérica, lo que provocó preocupaciones sobre la seguridad y el manejo del flujo migratorio.

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El Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) de Panamá emitió un comunicado al que tuvo acceso la agencia de noticias EFE, en el que se detalla que se tomaron medidas para el control de la migración irregular masiva que enfrenta el país. Según el documento, esta decisión busca “canalizar la migración irregular” hacia Bajo Chiquito, el primer pueblo al que llegan los migrantes tras atravesar la selva del Darién a pie.

“Con el anterior control se disponían de fuerzas de seguridad en múltiples puntos lo que dispersaba la eficiencia en la lucha contra las organizaciones delictivas transnacionales que se benefician del tráfico de personas, de cobros ilícitos y otros delitos conexos a esta población vulnerable”, según explicó el Senafront, que fue replicado por los medios locales panameños.

Por su parte, el Gobierno de los Estados Unidos dio a conocer un acuerdo histórico con Panamá destinado a enfrentar la crisis migratoria en la región del Darién. Este compromiso fue firmado durante la visita del secretario de Seguridad Nacional de EE. UU., Alejandro Mayorkas, al presidente panameño, José Raúl Mulino.

El plan piloto establecido por este acuerdo cuenta con una asignación inicial de seis millones de dólares proporcionados por Estados Unidos.

Marcela Escobari, asistente para América Latina y el Caribe de Joe Biden, presidente de Estados Unidos, destacó la gravedad de la situación en el Darién durante una videoconferencia con el medio panameño Dario medios, calificándola como “insostenible y en muchos casos trágicos”. Destacó en la necesidad urgente de desalentar a los migrantes de exponerse a riesgos extremos en busca de mejores oportunidades fuera de sus países de origen.

Cabe destacar que, el cruce del Darién, también conocido como el tapón del Darién, que abarca más de 100 kilómetros de territorio selvático, es utilizado no solo por migrantes en búsqueda de un futuro mejor, sino también por narcotraficantes, lo que incrementa los riesgos para quienes atraviesan la región. Esta iniciativa bilateral entre Estados Unidos y Panamá no solo pretende gestionar el flujo migratorio de manera más efectiva, sino también proteger a los migrantes vulnerables de la explotación por parte del crimen organizado transnacional.

• Financiamiento y capacitación: Estados Unidos financiará los costos asociados con los vuelos de repatriación y proporcionará entrenamiento y asistencia técnica a las autoridades panameñas. Esta inversión tiene como objetivo fortalecer los esfuerzos de Panamá para gestionar de manera más efectiva y humanitaria el flujo migratorio.
• Enfoque humanitario: Luis Miranda, del Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU., aseguró que el programa piloto incluirá medidas para garantizar que las deportaciones se lleven a cabo de manera humanitaria, respetando los derechos de los migrantes, independientemente de su nacionalidad.
• Mensaje disuasorio y alternativas legales: Marcela Escobari enfatizó que el acuerdo busca enviar un mensaje claro a los migrantes sobre la importancia de utilizar vías legales y seguras para migrar. Se está trabajando además en aumentar las opciones legales de regularización para aquellos que buscan protección o mejores oportunidades en Estados Unidos.

Aunque aún no se especificaron los detalles operativos precisos del acuerdo, los funcionarios involucrados aseguraron que se espera iniciar el proceso de repatriación en las próximas semanas, una vez que se finalicen los preparativos necesarios por parte de ambas naciones.