La ofensiva en contra de la extorsión y el secuestro, dos de los delitos que más aquejan a varias poblaciones en Colombia, sigue su paso y gracias a la acción mancomunada entre la Policía, el Ejército Nacional y la Fiscalía General de la Nación, dejó como resultado la captura de 196 personas pertenecientes a bandas criminales en medio de la operación Tacio.
La acción contra la delincuencia organizada se desarrolló en Bogotá, Cali (Valle del Cauca), Medellín (Antioquia) y Cartagena (Bolívar) y los departamentos de Huila, La Guajira, Magdalena, Sucre, Atlántico, Antioquia y Córdoba.
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En medio de rueda de prensa la mañana del miércoles 3 de julio, el Ministerio de Defensa, en cabeza de Iván Velásquez, junto al director de la Policía Nacional, general William Salamanca, brindaron detalles de las acciones que permitieron dar con los delincuentes en varios puntos de la geografía nacional, y que dejaron como resultado la desarticulación de cuatro estructuras criminales y la afectación a cinco bandas más, entre ellas, varias que harían parte del Clan del Golfo.
Los operativos hechos en simultáneo bajo la dirección del Gaula, dejaron como saldo la incautación de 25 armas de fuego, siete granadas, cuatro vehículos, ocho motocicletas y 117 celulares utilizados en su accionar criminal.
Los Sombras: el terror de los secuestros en Bogotá
Entre los grupos desarticulados se encuentra Los Sombras en Bogotá, una banda conformada por ocho individuos que delinquían en zonas como Chapinero, la zona T y el Antiguo Country (en la localidad de Usaquén) a bordo de taxis, y que en su haber cuenta con al menos 48 casos de ciudadanos que fueron secuestrados por falsos taxistas, quienes llevaba a las víctimas hasta zonas desoladas en donde las intimidaban con asesinarlas.
Valiéndose de armas cortopunzantes y de fuego, “los sometían a golpizas, asfixia mecánica y tocamientos indebidos, hasta obligarlos a entregar claves bancarias y activar aplicaciones móviles para realizar transferencias de dinero y hacer compras virtuales”, explicaron las autoridades.
En este caso las pesquisas para obtener todo el material probatorio contra la estructura delincuencial fue producto del seguimiento de seis meses hecho por las autoridades, y que llevó a que la Fiscalía profiriera las órdenes de captura contra la organización, entre las que figuran cuatro mujeres, y que con su aprehensión respondan por los delitos de secuestro extorsivo agravado, hurto calificado agravado y concierto para delinquir agravado.
Golpe al Clan del Golfo en Magdalena y La Guajira
Otro de los operativos que dejó esta ofensiva hecha en simultánea se produjo en Magdalena, dejando como saldo 22 capturas contra integrantes de las subestructuras Sergio Antonio Carrascal y David Meza Peña, ambas del Clan del Golfo, y a quienes se les acusa de varios casos de extorsión, homicidios selectivos y constreñimiento a la población civil.
Este operativo dejó la captura de alias César (cabecilla de la subestructura David Meza Peña) y alias Deivi (Sergio Antonio Carrascal Gómez), quienes según lo que indicó la Policía Nacional, “venían realizando exigencias económicas a profesores, comerciantes, ganaderos, agricultores, responsables de obras civiles, transportadores y comunidad en general, a cambio de supuestos servicios de seguridad y permitirles continuar con sus actividades sin ser objeto de atentados en su contra”.
Por este motivo, además del decomiso de 11 celulares, 3 granadas e igual número de armas de fuego, los detenidos deberán responder ante la Fiscalía por los delitos de homicidio, extorsión, concierto para delinquir agravado y fabricación, tráfico y porte de armas de fuego.
Hasta en wayuunaki se efectuaron órdenes de captura
En el municipio de Uribia, La Guajira, fue capturado alias ‘Camba’, quien no hablaba español, por lo que sus derechos fueron leídos en dialecto wayuunaiki. Esta persona es investigada por almacenar material bélico para realizar atentados y extorsionar a la comunidad.
En este caso, ‘Camba’ es investigado por “almacenar material bélico de esta organización, utilizado para realizar atentados contra la fuerza pública e intimidar a finqueros, bananeros, dueños o administradores de constructoras, transportadores y comunidad en general”, con el fin de obligarlos a pagar entre $2 y $500 millones para no atentar contra ellos, sus empleados y su infraestructura.
En la diligencia de allanamiento los agentes se llevaron una sorpresa al encontrar 8 fusiles, incluido un AK-47 cromado y bañado en oro, y que pertenecería alias Mario, cabecilla principal del Clan del Golfo en esta región del país, quien exhibía el arma como muestra de su poder, junto a una carabina, una escopeta y munición de diferentes calibres. Por tal razón Camba tendrá que responder por el delito de fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, partes o municiones.
En Antioquia el golpe fue para los ‘Pachelly’ y ‘El Tablazo’
En Antioquia, se impactaron los grupos conocidos como los Pachelly y El Tablazo. Las aprehensiones se hicieron en el municipio de Bello, que dejó la captura de 18 integrantes de los Pachelly acusados de extorsionar a la comunidad de al menos 12 barrios. En tanto en Itagüí, 13 miembros de El Tablazo fueron detenidos por extorsionar a comerciantes y empresas.
Las pesquisas dieron cuenta que las víctimas eran extorsionadas con cifras que podían ir desde las $2.000 hasta los $15 millones, dependiendo la capacidad económica del ciudadano afectado, y en total 30 personas denunciaron ser víctimas de los Pachelly.
Por esta razón la banda es investigada por venta y tráfico de estupefacientes, homicidios, porte ilegal de armas, hurtos, lesiones personales, instrumentalización de menores de edad en la comisión de delitos y desplazamiento forzado, con el fin de apoderarse de las propiedades de sus víctimas
De los detenidos en Itaguí, el cabecilla principal de la estructura era conocido con el alias de Diablo, quien junto a alias Richi, Manchas y Nano, “dinamizaba los diferentes delitos en este municipio, con ganancias anuales por más de $3.500 millones”.
En ocho casos registrados en esta jurisdicción, las víctimas comentaron a las autoridades que “si no se accedían a sus exigencias, eran golpeadas, atentaban contra sus bienes o las obligaban a abandonar sus viviendas, para apoderarse de ellas”.
Debido a todo lo anterior, los 31 capturados deberán responder por los delitos de homicidio, extorsión, secuestro, desplazamiento forzado, concierto para delinquir agravado y hurto calificado.
Por último, el Gaula confirmó que con esta, ya son seis las operaciones desarrolladas a lo largo de 2024, cuyo resultado dejó la desarticulación y/o afectación de 127 estructuras y la captura de 1.460 extorsionistas y 402 secuestradores, de los cuales el 86 % fue cobijado con medida de aseguramiento intramural.
La Policía Nacional continuará con la ofensiva contra el secuestro y la extorsión e invita a la comunidad a denunciar estos delitos. La línea gratuita nacional 165 está disponible para tal fin, destacando que el 82% de las víctimas que deciden denunciar no se ven obligadas a pagar las extorsiones.