Condenan a más de 17 años de prisión a sicario de La Oficina que asesinó a un parapentista en Valle del Cauca

La Fiscalía General de la Nación obtuvo pruebas concluyentes que demuestran la participación de Jesús Salvador Rodríguez Rengel, alias Chamo, en el asesinato del parapentista Jorge Iván González, ocurrido el 30 de septiembre de 2023 en Tuluá, Valle del Cauca.

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Alias Chamo, miembro destacado de la organización criminal La Oficina, aceptó su responsabilidad en los hechos mediante un preacuerdo y fue condenado a más de 15 años de prisión por un juez del ente acusador.

“Un juez penal del circuito de Tuluá avaló la negociación judicial y condenó a Rodríguez Rengel a 17 años y 2 meses de prisión por homicidio agravado y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego”, informó la Fiscalía en un comunicado.

El 30 de septiembre de 2023, Jorge Iván González, parapentista contratado para distribuir publicidad electoral, se encontraba volando sobre Tuluá, Valle del Cauca. Debido a una fuerte lluvia, González tuvo que descender de manera repentina en una zona conocida como Brisas del Valle, en el barrio San Francisco.

Al aterrizar, varios hombres armados, entre ellos Jesús Salvador Rodríguez Rengel, alias Chamo, miembro de la organización criminal La Oficina, lo abordaron y lo increparon por la actividad electoral que llevaba a cabo. En medio de la confrontación, alias Chamo y sus cómplices le dispararon a González, causándole la muerte instantánea. Tras el asesinato, los agresores arrojaron el cuerpo sin vida de González al río Tuluá, intentando ocultar el crimen.

La investigación, liderada por fiscales del Grupo de Homicidios Colectivos de la Dirección de Apoyo Territorial ha permitido judicializar a otros dos presuntos integrantes de La Oficina relacionados con este asesinato. Además, contra Rodríguez Rengel avanza otro proceso judicial por el delito de tráfico de estupefacientes.

En un operativo relámpago, la Policía Nacional capturó a dos presuntos integrantes del componente militar de la subestructura Javier Yepes Cantero, al servicio del temido Clan del Golfo, en el corregimiento de Puerto Nuevo, San Pelayo, departamento de Córdoba.

La Fiscalía General de la Nación informó sobre la judicialización de Yefer Elian Bertel Urango, alias El Monito, y Miguel Ángel Ibáñez Hernández, alias El Gago.

El pasado 26 de junio, durante las diligencias de registro y allanamiento, se les incautó un revolver, tres proveedores para fusil, cuatro cartuchos calibre 38, y 10 cartuchos calibre 5.56, además de celulares y documentos vinculados con la organización criminal. También se encontraron prendas de vestir que coinciden con las utilizadas en un atentado perpetrado contra varias droguerías en Cereté y San Pelayo el 22 de abril, hechos que todavía están bajo investigación.

Un fiscal de la Seccional Córdoba les imputó a ambos el delito de fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones. Sin embargo, tanto alias El Monito como alias El Gago no aceptaron los cargos.

En una decisión que ha generado diversas reacciones, un juez de control de garantías ordenó que Miguel Ángel Ibáñez Hernández, alias El Gago, cumpla medida de aseguramiento en centro carcelario, mientras que Yefer Elian Bertel Urango, alias El Monito, lo hará desde su domicilio.

Con estas capturas, las autoridades esperan debilitar significativamente una de las estructuras más violentas del Clan del Golfo y obtener información clave que permita desarticular más componentes de esta organización criminal que tanto azota a Córdoba.

La Oficina y el Clan del Golfo son dos organizaciones criminales prominentes en Colombia, con influencia significativa en el ámbito del narcotráfico y otras actividades ilícitas. La Oficina se originó como una alianza de narcotraficantes en Medellín, evolucionando hacia una estructura más compleja que incluye diversas subestructuras y frentes que operan principalmente en el departamento de Antioquia y sus alrededores.

Por otro lado, el Clan del Golfo, también conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), es una de las organizaciones criminales más grandes del país, con presencia en múltiples regiones, incluidas zonas estratégicas para el narcotráfico como el departamento de Córdoba y Urabá.