Las inversiones forzosas en el sector financiero durarán dos años, confirmó Gustavo Petro: así funcionará

El presidente de la República, Gustavo Petro, anunció que la medida de inversión forzosa con la que el Estado colombiano busca salir de la crisis financiera en la que se encuentra tendrá una duración de dos años.

En su cuenta de X, el primer mandatario escribió: “El Gobierno alista su paquete de reactivación económica para el 20 de julio basado en un porcentaje de inversión forzosa del ahorro nacional para la industria y la vivienda. Igualmente, dijo que con esta medida “mejorará la situación financiera de los bancos y será transitorio”, además de confirmar que se llevará a cabo por los próximos 24 meses.

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Con esta iniciativa, el jefe de Estado pretende mediar con los sectores privados para que otorguen un porcentaje mínimo de los ahorros de las personas a créditos que obligatoriamente se destinen a sectores con mayores necesidades, explicó el exviceministro de Hacienda Francisco Azuero. Asimismo, señaló que estos recursos también se pueden invertir en la compra de títulos como los que antes eran del Fondo Financiero Agropecuario o el Fondo Financiero Industrial.

Según el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, el capital de la intervención forzosa se empleará en fomentar la construcción de vivienda, las energías renovables y la infraestructura en salud y educación. Sin embargo, la medida impuesta por el Gobierno nacional fue objeto de críticas de expertos.

El exministro de Hacienda José Manuel Restrepo, uno de los principales opositores a la intervención forzosa, considera que la medida es inconveniente. A su juicio, “en vez de ayudar a impulsar el crédito, pone a todos los colombianos a pagar ese mayor costo”.

En ese sentido, dijo que “volver a esta idea de ‘inversiones forzosas’ que el país desarrolló con fuerza en los años 60 es una forma de imponer nuevos impuestos al sector productivo y financiero”. Además, fue enfático en expresar que “la iniciativa puede entorpecer o limitar el acceso al crédito al micro, pequeño, mediano y gran empresario”.

Esta medida se incluye en las propuestas de reactivación económica que el Gobierno nacional presentará en el Congreso de la República en el próximo periodo legislativo que inicia el 20 de julio, además de otros proyectos como una nueva reforma tributaria.

El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseguró el 26 de junio de 2024, que la nueva reforma tributaria busca reducir aún más la tasa nominal del impuesto de renta. Asimismo, mencionó que la tasa del impuesto de renta corporativo, que actualmente se sitúa entre el 35% y el 30%, podría disminuir aún más.

“La medida es reducir la tasa nominal del impuesto de renta corporativo en un rango del 35% al 30%. Podría reducirse aún más, pero tenemos que mirar en términos reales, porque lo que realmente le debe interesar al país no es la nominal, sino la real, y hay una brecha grande entre la nominal y la real”, enfatizó.

En ese sentido, aseguró que el principal fin de esta medida es recuperar la senda de reducción previa a la reforma tributaria de 2021 y hacerla operativa nuevamente. Otro aspecto relevante de la reforma tributaria es la inclusión de nuevos incentivos para sectores específicos, como el turismo. Aunque estos incentivos podrían significar una disminución en los ingresos fiscales del Estado, el ministro Bonilla defendió la medida argumentando que “si la economía crece, el impacto negativo en el recaudo podría ser compensado”.

De igual manera, el jefe de la cartera dijo que los estímulos generados con la aprobación de este proyecto de ley provocarán “una reducción de recaudo, pero si hay un crecimiento de la economía, lo que se tiene que mirar es qué tanto se compensa el crecimiento económico con la reducción por estímulo”.