En la tarde del miércoles 26 de junio, la Policía Metropolitana de Bogotá informó que en el norte de la ciudad un hombre lazó una granada hacia el interior de un establecimiento comercial, pero el artafecto no explotó.
Se conoció el relato de uno de los empleados de la empresa de mensajería, que contó detalles sobre el suceso y explicó que este es un hecho más de las extorsiones.
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En diálogos con el canal informativo Citytv, el trabajador reveló cómo vivió el tenso momento: “Llega una persona desde esta zona corriendo, viene con casco, se le traba ese artefacto, cuando ve que no lo puede activar, lo bota; después vemos que es una granada”.
Además, el empleado contó que los propietarios de la empresa han sido objeto de extorsiones por medio de llamadas y mensajes de WhatsApp desde inicio de año.
Esta situación ya había sido denunciado ante las autoridades competentes pero no se la había prestado atención, tras este último suceso, “esperamos que con esto las autoridades de verdad nos pongan cuidado en las denuncias que ya habíamos hecho”, señaló al medio mencionado el vocero del local de envíos ubicada en el norte de Bogotá.
Por otro lado, otra de las trabajadores en charlas con el medio radial Blu Radio aseguró que desde hace seis meses vienen siendo víctimas de extorsión y al no acceder pero al no acceder a sus exigencias, los bandidos los han venido amenazando de diversas maneras.
“Fuimos víctimas de esta clase de atentado que, gracias a Dios, no detonó ni nadie salió lastimado, pero eso no quiere decir que no haya pasado antes”, sostuvo la trabajadora.
La empleada de la empresa de envíos señaló también que durante las amenazas, estas personas al parecer, se identificaban como integrantes del Clan del Golfo.
Tras el frustrado atentado de este miércoles, los trabajadores manifiestan temor e incertidumbre acerca de los posibles alcances de estos delincuentes. Han solicitado el apoyo de las autoridades para prevenir una tragedia.
Los hechos
El acto de violencia que ha consternado a los bogotanos ocurrió en la tarde del miércoles 26 de junio de 2024, cuando criminales lanzaron una granada contra un establecimiento comercial situado al norte de la capital, en la calle 134 con carrera 19.
Según versiones preliminares, el artefacto no explotó. La Policía Metropolitana y el equipo de antiexplosivos acudieron al lugar para desactivar el dispositivo y asegurar la zona.
El teniente coronel Sergio Andrés Bayona Salazar, comandante operativo de seguridad ciudadana, informó que dos sujetos estarían involucrados en el incidente: “Uno de ellos ingresó al local comercial, lanzó un artefacto explosivo y huyó. De inmediato, nuestro equipo de Policía Judicial antiexplosivos controló la situación”.
La presencia de las autoridades brindó una leve sensación de tranquilidad a los ciudadanos, quienes exigen una investigación para esclarecer los motivos del ataque.
Las fuerzas de seguridad se encuentran revisando las cámaras de vigilancia para identificar y localizar a los responsables del incidente, que tuvo lugar a plena luz del día.
Testigos y residentes del sector informaron la situación a través de la línea 123. No se reportaron heridos.
La Unidad de Antiexplosivos continúa investigando el evento, ocurrido alrededor de las 3:30 p. m. en un establecimiento de mensajería y envíos internacionales. Afortunadamente, el explosivo no detonó y las personas presentes salieron ilesas.
Danny Conde, edil de la localidad de Usaquén, compartió con Blu Radio un video donde se observa a un hombre que, con el rostro cubierto por un casco, llegó al local e intentó varias veces activar la granada sin éxito. Al parecer, debido a los nervios, ingresó al establecimiento, dejó el artefacto y salió corriendo.