En Colombia, el ausentismo laboral injustificado ha sido un problema creciente. Durante 2023, el 58,47 % de las ausencias laborales fueron injustificadas, según un informe de la Federación Colombiana de Gestión Humana (Acrip).
Este comportamiento, sin duda, genera importantes pérdidas económicas y baja productividad en las empresas del país.
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El Código Sustantivo del Trabajo en Colombia, en el numeral 4 del artículo 60, prohíbe faltar al trabajo sin una causa justa que lo impida o sin permiso del empleador, exceptuando los casos de huelga.
La falta de justificación por parte de los empleados, ya sea mediante un documento del empleador o una certificación médica, puede llevar a diversas sanciones. “No justificar una ausencia puede acarrear consecuencias graves para el trabajador”, señala el informe.
Los empleadores deben primero escuchar al empleado antes de imponer sanciones, ya que la explicación del trabajador podría evitar una amonestación.
Si la ausencia provoca perjuicios importantes o si se trata de un comportamiento recurrente, las sanciones pueden ser más severas. “El empleador debe evaluar el impacto de la ausencia en la dinámica de la empresa”, resalta el informe.
Entre las posibles sanciones, los llamados de atención son las menos severas. Éstos pueden ser verbales o escritos y buscan corregir la conducta del trabajador recordándole sus obligaciones laborales. Sin embargo, cuando la falta es más grave, se pueden imponer multas según el artículo 113 del Código Sustantivo del Trabajo. Estas multas no pueden exceder la quinta parte del salario mínimo legal diario vigente, lo que en términos prácticos equivale a la remuneración de un día de trabajo.
Además, las multas pueden descontarse del valor total de los salarios y no impiden que se deduzca el salario correspondiente al tiempo no trabajado. “Las multas son una herramienta para asegurar el cumplimiento de las obligaciones laborales”, explica el documento de Acrip.
En casos de ausentismo recurrente, el empleador está legalmente facultado para despedir al empleado. El artículo 62 del Código Sustantivo del Trabajo permite la terminación unilateral del contrato laboral si este comportamiento se considera perjudicial para la empresa. “El despido puede proceder si el empleado no acata los llamados de atención”, subraya el informe.
Faltar al trabajo de manera injustificada puede ocurrir por varias razones, como no acudir al lugar de trabajo sin previo aviso, no responder a las llamadas o mensajes de la empresa, abandonar el lugar de trabajo antes de finalizar la jornada sin autorización, y no regresar de la hora de almuerzo o descanso.
También incluye llegar tarde al trabajo habitualmente sin una causa válida o faltar al trabajo para atender asuntos personales, sociales o familiares.
Así mismo, algunas ausencias pueden justificarse, tales como enfermedad (comprobada o no), razones de carácter familiar o personal avisadas previamente al jefe inmediato o al área de recursos humanos, tardanzas involuntarias por motivos de fuerza mayor, problemas de transporte, atascos, accidentes, obras o retenciones, falta de motivación para trabajar, agotamiento físico y/o mental, y dificultades con líderes o compañeros de trabajo. “Las justificaciones adecuadas evitan sanciones y multas”, afirma el informe de Acrip.
La creciente tasa de absentismo injustificado en Colombia genera preocupación entre los empleadores, ya que no solo afecta la productividad, sino también la moral y cohesión dentro de las empresas. Este fenómeno subraya la importancia de mantener una comunicación abierta y clara entre empleadores y empleados para prevenir malentendidos y sanciones.
Estrategias efectivas para reducir el ausentismo laboral en empresas colombianas
El ausentismo laboral es un desafío recurrente para muchas empresas en Colombia. Según un estudio realizado por la Federación Colombiana de Gestión Humana (Acrip), las estrategias efectivas para mitigar este problema pueden dividirse en varios enfoques clave.
Un primer paso recomendado es identificar las causas exactas del ausentismo. Esto implica evaluar una serie de factores que pueden variar desde problemas de tráfico hasta condiciones de salud familiar y situaciones socio-políticas. Comprender estos motivos permite a las empresas tener un panorama claro y adoptar medidas adecuadas.
Entre las estrategias sugeridas se encuentra la implementación de bonificaciones que incentiven la asistencia regular al trabajo. Estas recompensas pueden alentar la puntualidad y el compromiso con los horarios establecidos, lo cual podría reducir significativamente las ausencias no justificadas.
Otra medida viable es establecer una política de permisos remunerados. Si bien muchas ausencias están justificadas y son necesarias, una política clara puede ayudar a equilibrar el impacto financiero y productivo de estas ausencias. Por ejemplo, se podrían programar descuentos en la nómina para mitigar parcialmente el efecto de las mismas.
El estudio de Acrip provee una base sólida para que las empresas diseñen y adopten estrategias personalizadas que atiendan las necesidades específicas de sus empleados y, al mismo tiempo, fortalezcan la productividad organizacional.