Denuncias hechas por oficiales del Ejército Nacional de Colombia están revelando una presunta manipulación en el proceso de ascensos militares por parte del ministro de Defensa, Iván Velásquez, y su secretaria privada, Adriana Fernández.
Aunque, por ahora, las inconformidades han sido emitidas por uniformados que han preferido mantenerse anónimos, la situación estaría generando el descontento suficiente para conocerse acusaciones de persecución política y discriminación dentro de las Fuerzas Militares.
Un coronel del Ejército con más de 27 años de servicio cuya identidad sigue en reserva, por motivos de seguridad, afirmó en Semana que “lo que voy a decir suena feo, pero es la realidad, el alto mando dejó manosear la institución, ahora los ascensos los decide una secretaria sin formación militar”. De hecho, el oficial destacó que, aunque su hoja de vida contaba con el visto bueno de las Fuerzas Militares, su ascenso fue bloqueado por la oficina del ministro. Además, explicó que el proceso de evaluación para el ascenso es extenso e incluye pruebas académicas, físicas, poligráficas, investigaciones internas y estudios familiares.
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Otros militares entrevistados por el mismo medio expresaron inquietudes similares. Un coronel activo insistió en que “el ministro de Defensa está politizando la fuerza, eso no debe pasar”. Según este oficial, en algunos casos, se observan ascensos de oficiales con investigaciones graves, mientras que, a otros, sin manchas en su carrera, se les niega el ascenso. El uniformado también tiene un proceso activo en la JEP, aunque subrayó que en el pasado su caso había sido fallado a su favor y fue reabierto debido al proceso de paz con las Farc.
Iván Velásquez, con estas denuncias, fue acusado de seguir un patrón que excluye a oficiales de larga trayectoria, especialmente a aquellos involucrados en operaciones especiales contra las Farc. Por eso, “el mensaje a quienes están adentro es que no formen parte de las fuerzas especiales porque allí uno casi siempre termina con investigaciones y eso se convierte en un problema para ascender”, comentó uno de los militares entrevistados.
La secretaria del ministro
A través de fuentes militares, en Semana se descubrió que esta no es una práctica aislada del Ministerio. Los oficiales afectados señalan que, después de pasar un año de rigurosos filtros y evaluaciones internas, sus ascensos fueron bloqueados por Fernández, la secretaria del ministro Velásquez, quien habría impuesto recomendaciones no vinculantes de la Comisión de la Verdad, dirigida por el padre Francisco de Roux, quien, a su vez, sugirió que militares con investigaciones judiciales no deberían ascender. Sin embargo, los uniformados argumentan que esa sugerencia viola su derecho a la presunción de inocencia.
De acuerdo con la información del medio, el ministro de Hacienda defendió el rol de su secretaria privada y declaró que “en varias oportunidades, de acuerdo con sus funciones, la doctora Fernández colabora con el rol de revisar, pero soy yo quien, una vez me presentan los soportes y documentos, defino la postura a tomarse en las diferentes juntas y ella se encarga de transmitir a las dependencias de Talento Humano de cada fuerza”.
Un ejemplo de la controversia es el caso del coronel Carlos Feria, quien, pese a estar acusado por la Fiscalía de delitos graves en el caso de Marelbys Meza, fue promovido. Y por eso, el contraste con otros casos que no tiene controversia marca mucho más la frustración entre los oficiales que no han sido imputados ni acusados formalmente, pero cuyos ascensos fueron obstaculizados.
El abogado John Castro, experto en derecho militar, advirtió en el medio que las acciones del ministro pueden llevar a un detrimento patrimonial. Prevé que los oficiales impedidos de ascender demandarían al Estado y posiblemente ganen. Finalmente, oficiales de alto rango insisten en que el sistema de ascensos debe respetar la meritocracia y las normas establecidas. “Me siento traicionado”, expresó un oficial, que manifestó que la circunstancia es grave mientras el silencio de los altos mandos contribuiría con la posible injusticia.