Durante 12 horas permaneció cerrada la vía al mar en Nariño debido a los múltiples deslizamientos de tierra que fueron provocados por la intensa ola invernal, por lo que ya está habilitada la vía que de Pasto conduce al puerto de Tumaco.
Cabe recordar que, en la tarde del jueves 20 de junio, entre los kilómetros 23 y 30, los deslizamientos de tierra se originaron tras las fuertes lluvias, ocasionando el cierre total de la vía al mar en Nariño.
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La Alcaldía de Ricaurte informó por medio de un comunicado que luego de una rápida y efectiva reacción “fue habilitada la vía al mar con paso restringido únicamente por un carril. Esta medida es un gran logro para la seguridad y fluidez del tráfico en la zona, evitando congestiones y riesgos para los conductores y peatones”.
El secretario de Infraestructura de la Gobernación de Nariño, Gabriel Osejo, expresó que “se acaba de habilitar con el banco de maquinaria amarilla un carril para el paso en el sentido Túquerres-Tumaco, esperamos que con la continuación de las labores al medio día de hoy tengamos un paso normal en los dos sentidos de este importante corredor vial del departamento”.
La Dirección Administrativa de Gestión del Riesgo de Desastres de Nariño reveló en un informe que por la ola invernal registrada en la región hay un total de 9.000 personas damnificadas. Por lo tanto, las familias afectadas están localizadas en 34 de los 64 municipios de Nariño, a quienes se les suministrará 780 kits de aseo, alimentarios y de cocina por parte de la Federación Nacional de Departamentos.
En este sentido, Gabriel Ocaña, director del organismo, hizo un llamado a las administraciones municipales para que activen los planes de gestión de riesgo debido a las frecuentes lluvias que se registrarán durante agosto de 2024. Además, manifestó que esas acciones llevarán a que los municipios tomen medidas de precaución, pues podrá llevar a cabo la reubicación preventiva de viviendas para identificar las afectaciones materiales que se puedan presentar.
Alerta en Providencia por temporada de huracanes
La Procuraduría General de la Nación emitió una alerta al Gobierno nacional por el incumplimiento en la finalización de varias obras en la isla de Providencia. A pesar de las órdenes y planes establecidos tras el paso de los huracanes Iota y Eta en 2020, numerosos proyectos prometidos continúan inconclusos, lo que pone en riesgo a la población ante la actual temporada de huracanes que inició en junio.
El Ministerio Público subrayó que, pese a las directrices del Plan de Acción Específico (PAE), “no se han solucionado las fallas identificadas en refugios temporales y no se ha concretado la construcción de un refugio definitivo”, especificó la Procuraduría.
Entre las obras pendientes se destacan la puesta en marcha de refugios clave, como las iglesias Bautista Sur Oeste, Católica del Centro, Católica Casa Baja, Casa Música e Iglesia Bautista Centro. La falta de estos incentivos y refugios podría exponer a los habitantes de Providencia a peligros graves durante la temporada de huracanes.
La entidad recordó que la falta de cumplimiento de la legislación relacionada con la protección de recursos naturales, el medio ambiente y la prevención de desastres, representa una falta disciplinaria de acuerdo con el código general disciplinario. “No cumplir la legislación relacionada con la protección de los recursos naturales y el medio ambiente y la prevención de desastres, constituye falta disciplinaria”, advirtió la Procuraduría.
Desde el devastador impacto de los huracanes Iota y Eta hace tres años, Providencia ha esperado la correcta ejecución de los proyectos de reconstrucción. Estos esfuerzos son cruciales no solo para la seguridad estructural de la isla, sino también para proteger a sus habitantes ante futuros eventos climáticos extremos.
La culminación de los proyectos es “esencial para garantizar la seguridad y bienestar de los habitantes”, concluyó la Procuraduría en su llamado.