El escándalo de corrupción que enloda a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) empezó a destaparse con cuestionamientos que surgieron en torno a decenas de carrotanques que habían sido comprados para el suministro de agua en La Guajira. Entonces, se evidenció que los camiones estaban varados en un parqueadero, sin ser utilizados para el propósito para el cual fueron adquiridos.
El exsubdirector de manejo de desastres de la Ungrd Sneyder Pinilla confesó, en conversación con la revista Semana, que hizo parte del entramado de corrupción en el que se desviaron recursos del contrato con el que se compraron los 40 carrotanques. Ahora, en medio de las investigaciones que adelanta la Corte Suprema de Justicia al respecto, que involucran también al exidrector de la entidad Olmedo López, se conocen detalles de qué ha pasado con los vehículos en cuestión.
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Según informó el actual director Carlos Carrillo en el programa Sigue La W de W Radio, en principio, los camiones terminaron “arrumados” porque no contaban con pólizas de seguro para operar, lo cual es obligatorio para cualquier entidad del Estado, que tiene la responsabilidad de asegurar sus bienes. En ese sentido, indicó que en total, tanto Sneyder Pinilla como el exdirector de la entidad Olmedo López alcanzaron a comprar 120 carrotanques, de los cuales hay que verificar si están en buenas condiciones para ponerlos a funcionar. De la totalidad, 40 están en Riohacha y 80, en Uribia.
De acuerdo con primeras evaluaciones que se han hecho al respecto, por lo menos 80 de los camiones están en perfectas condiciones, porque están relativamente nuevos. Pero, hay un problema con los tanques, que fueron adquiridos con distintas empresas. “El asunto son los tanques, hay unos que ya colapsaron, otros tienen graves problemas, como por ejemplo que las motobombas obstruyen las luces traseras, un carro está obligado a tener luces traseras”, precisó.
Por otro lado, los camiones de Riohacha, específicamente, no cuentan con aire acondicionado, a pesar de que los “bandidos” pagaron $720 millones por vehículos que no cuentan con esta adición, esencial para el trabajo en un departamento como La Guajira. “Usted cómo va a manejar un carrotanque a 40 grados de temperatura en el desierto de la Guajira sin aire acondicionado”, aseveró.
Independientemente de su estado, lo cierto es que no podrán ser utilizados hasta que cuenten con las respectivas pólizas de seguro. El proceso para lograr esto ha sido complejo debido al escándalo de corrupción que los rodea. Nadie quiere verse salpicado en la polémica. “Probablemente, hoy no queda un solo colombiano en la diáspora que no haya escuchado hablar de estos carrotanques, y por eso las aseguradoras se han negado a asegurarlos, por temas reputacionales evidentes, por eso, mientras esos carrotanques no tengan seguro todo riesgo, no puede empezar a operar”, aseguró el funcionario en conversación con el medio citado.
No obstante, indicó que, en medio de los problemas, se logró que los camiones permanezcan asegurados mientras están en reposo, por medio de un contrato de pequeña cuantía. Además, se está llevando a cabo un trámite de contratación de seguros para los 40 vehículos pequeños que fueron adquiridos, aunque esto podría tardar algunos meses en efectuarse.
Aseguró que no se ha considerado la posibilidad de que los camiones sean desechados como chatarra, sino que, por el contrario, se están adelantando los procesos necesarios para ponerlos a operar. Pero, añadió otro problema a la situación, relacionado con los seguros del contrato con el que se compraron los vehículos, puesto que Pinilla recibió los carrotanques a satisfacción, lo que quiere decir que la entidad los aceptó sin reparos y, en esa medida, difícilmente la aseguradora responderá por lo que haya faltado.