La Policía Metropolitana de Bogotá informó de la captura de un hombre de 50 años por el delito de violencia intrafamiliar. El incidente ocurrió en el sur de Bogotá, puntualmente en la localidad de Tunjuelito.

Según el reporte oficial, los uniformados de la estación de Policía de la localidad realizaban labores de vigilancia en la zona cuando fueron alertados por una mujer que manifestó haber sido agredida. Según el relato de la víctima, su pareja sentimental intentó asfixiarla dentro de su vehículo particular. La mujer logró escapar y avisar a las autoridades.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

De manera inmediata, los agentes localizaron el automóvil y procedieron a detener al agresor, quien fue puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación para responder por el delito de violencia intrafamiliar. Entre enero y mayo de 2024 se han presentado alrededor de 16.800 denuncias de violencia intrafamiliar en comisarías de familia de la capital colombina; siete de cada diez personas afectadas por esta situación son mujeres.

La teniente coronel Bibiana Valencia, jefe del Grupo de Prevención de la Policía Metropolitana de Bogotá indicó que la mujer víctima manifestó que había sido objeto de agresiones. “Invitamos a todas nuestras mujeres a no normalizar ningún tipo de violencia. Les recordamos que pueden acudir a cualquier estación de Policía o a las líneas de emergencia”, concluyó la coronel Valencia.

Si conoce algún caso de violencia intrafamiliar o de género puede comunicarse en estos canales para recibir ayuda:

• Línea Única de Atención de Emergencias: Línea 123.
• Línea 122: recibe denuncias de violencia intrafamiliar, violencias basadas en género y violencia sexual, además de la página web www.fiscalia.gov.co.
• Línea 155: disponible en todo el territorio nacional las 24 horas del día para orientar a mujeres víctimas de violencia basada en género.
• Línea Púrpura Bogotá: 018000112137. Gratuito y operativo las 24 horas, todos los días, atendido por profesionales con perspectiva de género.
• Icbf: Línea 141 para casos en los que se vea amenazada la integridad de niños, niñas y adolescentes.

El alarmante aumento de feminicidios en Bogotá y en Colombia en lo que va del año ha puesto en alerta a las autoridades y a las organizaciones de defensa de los derechos de las mujeres. De acuerdo con el Observatorio de Feminicidios de Colombia, en Bogotá se registraron tres feminicidios más en los primeros cuatro meses de 2024 en comparación con el mismo periodo del año pasado. Hasta abril, se han contabilizado 26 feminicidios en la capital, frente a los 23 reportados en el mismo periodo de 2023.

Además, según datos del Distrito, alrededor de 665 mujeres en Bogotá están actualmente en riesgo de feminicidio. Para atender a las mujeres en riesgo, la “ruta única de atención” se activa a través de una llamada, que puede ser tanto para orientación como para iniciar medidas de protección. Entre estas medidas se incluye la posibilidad de que las mujeres acudan a una casa refugio.

Entre enero y abril de 2024, 246 personas han sido acogidas en estas casas refugio, de las cuales 115 son mujeres en riesgo y 131 son familiares cercanos, como indicó la Secretaría de la Mujer a este medio. Sin duda, este es un espacio que permite salvaguardar la vida de la mujer, pero es una solución temporal y no elimina el riesgo hacia la mujer ni mejora sus condiciones de vida.

Un estudio realizado por Laura Daniela Torres de la Universidad de La Salle ha revelado que las casas refugio actualmente son viviendas donadas y adaptadas para este uso, lo que significa que no fueron construidas pensando en el bienestar de las residentes. Esta falta de adecuación muchas veces resulta en espacios inadecuados para la convivencia de las diferentes familias y mujeres que necesitan atención.

Otro de los problemas de las casas refugio es que “las mujeres quedan encerradas, con sus vidas congeladas y sin fuentes de ingresos”, explicó Carol Rojas, coordinadora del Observatorio Colombiano de Feminicidios, en una entrevista con La Silla Vacía. Este problema resalta la necesidad urgente de mejorar la infraestructura y las condiciones de las casas refugio para ofrecer una solución más adecuada y digna a las mujeres en riesgo y a sus familias.