Con la aprobación en último debate del Congreso de la reforma del sistema de pensiones, el país volvió a encenderse por el que es catalogado como un triunfo para el Gobierno de Gustavo Petro. Aunque la oposición sigue insistiendo en tumbarla con recursos legales en la Corte Constitucional, desde el Ejecutivo aseguran que es la mejor opción para los colombianos.
De hecho, en las últimas horas el viceministro de Empleo y Pensiones, Iván Daniel Jaramillo, aseguró que esa reforma está garantizada para sostenerse en el tiempo gracias a un trabajo arduo de las carteras de Hacienda y Trabajo que permitirá a la reforma mantenerse vigente, al menos, por cuarenta años.
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“La reforma tiene aval fiscal del Ministerio de Hacienda, con lo cual tiene su respaldo, y fue construida de manera responsable por el equipo económico del Gobierno. Además, el costo está centrado en el pilar solidario, que se financia con recursos del Presupuesto General de la Nación y la subcuenta del Fondo de Solidaridad Pensional” comentó Jaramillo en una entrevista concedida a El Tiempo.
En cuanto a los pilares semicontributivo y contributivo, el viceministro aseguró que se establecerá un fondo de ahorro que permitirá generar ahorros en el corto y mediano plazo. Sin embargo, según proyecciones del Ministerio de Hacienda, este fondo tendrá total autonomía en un plazo mínimo de 40 años, lo que permitirá a los más jóvenes conseguir la pensión sin problemas financieros.
“La idea es que para 2070 ese fondo va a llegar a su máximo, pero no significa que no sea sostenible, sino que hoy los sistemas pensionales tienen que estarse revisando constantemente y por eso se incluye una cláusula de revisión cuatrienal. Igualmente, es fiscalmente sostenible porque estamos reconociendo mesadas que son de máximo 2,3 salarios mínimos, lo que genera equidad y permite distribuir mejor los recursos”, comentó Jaramillo al medio.
Ante las inquietudes sobre las garantías de pensión para los jóvenes, Jaramillo argumentó que, si no se realiza la reforma, en un plazo de 15 a 25 años el sistema actual no podrá respaldar las promesas de prestación. Indicó también que los cambios son necesarios debido a factores como la longevidad y la disminución en la natalidad.
“La tranquilidad es que los recursos que está recibiendo el sistema público, dado que todos vamos a ir ahí hasta 2,3 salarios mínimos, estarán en un fondo de ahorro; es decir, van a ser destinados a un respaldo para que las futuras generaciones tengan tranquilidad de que esos ingresos están llegando al sistema”, indicó.
Sobre el seguimiento a la reforma, Jaramillo explicó que el sistema pensional, creado en 1967, ha experimentado varias modificaciones en los años 1993, 2003, 2005 y ahora en 2023 con la aprobación del nuevo proyecto. Incluso, destacó que, aunque la reforma está garantizada por las próximas cuatro décadas, el sistema pensional debe monitorearse constantemente debido a los cambios demográficos.
“Cada cuatro años habrá una comisión técnica que evaluará estos parámetros y entregará un informe al Congreso para que este tome decisiones. Yo diría que durante 40 años el sistema va a dar ahorro y tiene garantizada la sostenibilidad financiera. En ese tiempo habrá 10 posibilidades de hacer cambios”, comentó el viceministro al diario nacional.
En relación con la capacidad de Colpensiones para recibir nuevos afiliados, Jaramillo afirmó que la entidad ha estado preparando este proceso desde octubre de 2022. Según él, Colpensiones ha mejorado sus sistemas operativos para gestionar a los 25 millones de afiliados que recibirán hasta 2.3 salarios mínimos.
El viceministro también abordó cómo blindar los recursos del fondo de ahorro contra posibles manejos políticos. Indicó que, inicialmente, se proponía que Colpensiones administrara el fondo, pero tras el debate democrático, se decidió transferir esta responsabilidad al Banco de la República.
“El Emisor lo que va a hacer es administrar los recursos; sin embargo, no se encargará de reconocer las pensiones, de decir tu pensión será de esto o esto. Propusimos la conformación de un comité directivo de ese fondo. Entiendo las críticas, pero lo que se busca es que existan reglas de gobierno corporativo en la administración de esos recursos”, destacó.
Finalmente, Jaramillo aclaró las críticas sobre el posible nuevo impuesto a las pensiones, argumentando que serán gravadas las pensiones que superen las 1.000 unidades de valor tributario (UVT), es decir, alrededor de 47 millones de pesos mensuales, y no las de 3,6 millones de pesos. Incluso, aseguró que, durante su discusión, ese aparte fue malinterpretado y dio espacio a especulaciones y críticas, pero recordó que el Estatuto Tributario ya establece este gravamen.