Tras un año y medio de entrar en vigor la reforma tributaria del presidente Gustavo Petro, los resultados de la norma siguen en discusión y para el exvicepresidente Germán Vargas Lleras lo que ha reflejado son una serie de errores que no tuvieron en cuenta los funcionarios del Gobierno que la impulsaron.
El jefe de Cambio Radical aseguró que se reunió en al menos dos ocasiones con el exministro de Hacienda José Antonio Ocampo, durante la formulación de la reforma tributaria de 2022, para advertirle que el país se encontraba al borde de una recesión, sumada a la incertidumbre que generaban los anuncios de reformas del recién inaugurado Gobierno.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
Para el exvicepresidente, la reforma no era necesaria y se debía profundizar en la que adelantó el Gobierno Duque en 2021, sobre la cual ese partido había estado de acuerdo. Pero contra las advertencias que dice haber hecho, la reforma fue presentada y aprobada para su entrada en vigor en enero de 2023.
“Con tan solo un año de vigencia de esta nefasta reforma, el crecimiento económico se desplomó y también los ingresos fiscales presupuestados, lo que ha conducido al insuficiente recorte anunciado por el Minhacienda de $ 20 billones, que debería más bien rondar los $ 50 billones”, escribió Vargas Lleras en su columna dominical de El Tiempo.
El líder opositor augura que el recaudo continuará a la baja durante el segundo semestre de 2024, por lo que el Gobierno tendrá que romper la regla fiscal, que son los límites al gasto público y al endeudamiento para garantizar la estabilidad socioeconómica del país.
Vargas Lleras sostiene que se cometieron varios “errores” en la reforma tributaria de 2022. Uno de ellos, en el que también coincide Álvaro Uribe, es el impuesto al patrimonio que había eliminado el Gobierno de Iván Duque y que tuvo una amplia discusión en el trámite del proyecto.
“Para muchas personas naturales que en el año 2023 no tuvieron utilidad, un impuesto del 1,5 % sobre el patrimonio equivale a una confiscación de este”, señaló Vargas Lleras, quien aseguró que el gravamen ha ocasionado que los colombianos trasladen su residencia al exterior.
“Aun en años de normalidad económica, hay patrimonios que tienen baja rentabilidad, como es el caso de los predios agrícolas, que al someterlos al impuesto sobre la renta, al impuesto predial y al impuesto al patrimonio se ven afectados con una tributación que supera la rentabilidad que se obtiene de su explotación”, aseguró el exvicepresidente.
Así mismo, aseguró que la eliminación del descuento del ICA en el impuesto de renta aumentó la tributación de contribuyente con bajo margen de rentabilidad, al igual que el gravamen del 20% a los alimentos ultra procesados ha tenido impacto en el consumo.
También sostuvo que se introdujo la tributación mínima del 15% sobre las utilidades comerciales de las empresas, argumentando que se trataba de una recomendación de la Ocde, a pesar de que pocos países han adoptado esa medida, que ha causado dificultades debido a la diferencia de tiempos entre la declaración de renta y la contabilidad.
Además, reiteró como otro error la no deducibilidad de las regalías para las empresas exportadoras de carbón y petróleo, que finalmente tumbó la Corte Constitucional, en una decisión que no solo le restó una fuente importante de recursos al recaudo esperado de la tributaria, sino que además le ordenó al Gobierno devolver lo recaudado en la vigencia de ese impuesto.
Como un “desmadre económico” calificó Vargas Lleras el resultado de la reforma tributaria que formuló Ocampo, del que tampoco excluyó a Luis Carlos Reyes, anterior director de la Dian, quien pasó a ser ministro de Comercio.
“Mientras todo esto sucede, el exdirector de la Dian, que se hacía llamar en las redes sociales ‘Mr. Taxes’, y que tenía a su cargo el recaudo tributario de la nación, en premio por su gestión, ahora es ascendido a ministro de Comercio. Imagino que ahora se hará llamar Mr. Déficit”, escribió el exvicepresidente.