El proyecto de Paz Total que promueve el presidente de la República, Gustavo Petro, no deja de ser uno de los lunares de su Gobierno, pues sus principales detractores no ven con buenos ojos las negociaciones con bandas criminales de nueva y vieja data, en las que algunos no han dejado a un lado sus ataques contra la fuerza pública, y por ende, reflejan su poca voluntad de deponer la armas.
Quien ha sido encargado de llevar adelante dicha misión como alto comisionado para la Paz es Otty Patino, reputado politólogo y escritor con más de 35 años de experiencia en procesos de negociación; que no ha presentado resultados contundentes en más de un año de conversaciones con estructuras delincuenciales.
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Al respecto, el senador del Partido de la U Antonio Correa no dudó en expresar su percepción del alto comisionado y su gestión en lo que lleva en el cargo. “Es importante sentar una posición que vaya al hecho, no se puede estar sentado benévolamente brindando todas las garantías a este grupo pensionado de la guerra (ELN), grupo ilegal, mientras maltrate cuando le venga en gana al presidente de Colombia”, afirmó Correa, en entrevista con Semana.
El político del Partido de la U destacó que sí existen grupos que desean hacer la paz, razón por la cual le solicitó a Patiño enfocar sus esfuerzos en ellos: “Señor comisionado, acelere esos procesos que sí tienen toda la voluntad, usted debería ser más dinámico o nos va a hacer fracasar la paz como política de gobierno”.
Asimismo, el senador indicó que Otty Patiño “está enfrascado solo en uno o dos procesos de paz”, descuidando las conversaciones con otras estructuras armadas ilegales, “es un conocedor de la paz, pero le falta dinámica que es lo que hoy se requiere”, complementó. Y agregó que, “la paz no puede ir al ritmo de vida de Otty Patiño, o sea a 20 kilómetro por hora”.
También se refirió a reciente llamado de voceros del Gobierno nacional para que Antonio García, líder máximo del Ejército de Liberación Nacional (ELN), deje de lanzar señalamientos en contra el primer mandatario. “Le hago un llamado a la mesa de diálogo del Gobierno nacional. No es solamente pedirle al ELN la no agresión al presidente Gustavo Petro”, dijo al medio citado.
Correa también se despachó en comentarios contra García, afirmando que “ya es hora de que el ilegal pensionado entienda que hoy su grupo es ilegal, narcotraficante y nada político, en donde algunos disfrutan su pensión de vejez y los jóvenes son los nuevos jefes del traqueteo”.
La respuesta de la delegación del Gobierno Petro a comentarios de Antonio García
El 10 de junio de 2024, voceros del Gobierno respondieron a las acusaciones de Eliécer Herlinto Chamorro, alias Antonio García, comandante del ELN, que denunció supuestos incumplimientos y congelamiento de los diálogos de paz por parte del gobierno nacional.
A través de un comunicado, la delegación gubernamental reafirmó su compromiso con los acuerdos alcanzados y recordaron que hace poco más de dos semanas ambas partes firmaron un acuerdo en Caracas, a pesar de la decisión del ELN de no renunciar a los secuestros extorsivos. En particular, el acuerdo No. 28 sobre la Participación fue firmado para asegurar el cumplimiento hacia las comunidades y sectores involucrados en el proceso de paz, según destacaron los representantes del Gobierno.
Contrario a lo mencionado por García, desde la delegación se reiteró que los compromisos adquiridos, como el cese al fuego, siguen vigentes. “Hemos cumplido todos los compromisos, que incluye proponer soluciones a las crisis, hemos guardado pacientemente silencio para no seguir en la lógica de la confrontación mediática”, aclaró el equipo dirigido por Vera Grabe.
En este contexto, la delegación gubernamental solicitó a García “renunciar a la estrategia del ataque y de la difamación personal”. En lugar de esto, invitaron a la insurgencia a mantener los avances logrados en las conversaciones de paz, incluyendo la suspensión del secuestro por razones económicas. Además, hicieron un llamado urgente a trabajar sin dilaciones en el cumplimiento del acuerdo de participación, el cese al fuego y las dinámicas humanitarias necesarias para las comunidades.
“Hemos firmado el primer punto de la Agenda de Diálogos sobre la Participación -Acuerdo No. 28- para cumplirle a las comunidades y a los sectores que depositaron su confianza en el diseño de la intervención democrática en este proceso”, señaló el comunicado gubernamental. Sin embargo, reconocieron que persisten crisis no abordadas en la mesa de diálogos.