Madre denuncia desaparición de cadáver de su bebé en clínica de Armenia

En la clínica La Sagrada Familia, Gloria Gómez informó que el cuerpo de su bebé recién nacido no ha sido encontrado. La familia exige respuestas urgentes

El bebé falleció a causa de una enfermedad huérfana que padecía - crédito Europa Press

En un hecho que ha generado conmoción y consternación, Gloria Patricia Gómez Tabares denunció la desaparición del cadáver de su hijo recién nacido en la clínica La Sagrada Familia de Armenia, centro asistencial en el departamento de Quindío. El incidente ocurrió después de que el menor falleciera el miércoles por la tarde, tras no responder al tratamiento médico suministrado debido a una condición de patología huérfana.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

Según el relato de Gómez Tabares, su hijo nació el lunes 3 de junio con problemas respiratorios que requirieron su ingreso inmediato a una incubadora. Durante dos días, el bebé recibió tratamientos médicos, pero no logró recuperarse. El miércoles 5 de junio, el especialista a cargo informó a los padres que el pequeño Joseph Orozco Gómez no estaba respondiendo y que debían despedirse de él.

A las 12:55 de la tarde del mismo miércoles, el profesional de salud desconectó al bebé de todos los instrumentos tecnológicos después de confirmar su deceso. Posteriormente, el médico explicó las causas del fallecimiento a la madre y le proporcionó el acta de defunción. Gómez Tabares aceptó que la clínica realizara una necropsia al bebé para determinar más detalles sobre la condición genética que padecía.

La madre firmó los documentos necesarios para reclamar el cuerpo de su hijo y trasladarlo a una funeraria. Sin embargo, cuando el viernes 7 de junio contactó a la clínica para preguntar sobre la disponibilidad del cuerpo, le informaron que podía recogerlo ese mismo día.

La madre del bebé aseguró que fue a preguntar por el cuerpo del bebé a la morgue y le dijeron que no estaba - crédito Europa Press

Al llegar a la clínica, alrededor de las 2 p. m., la madre se presentó con la orden de salida para trasladar el cadáver a la funeraria. Fue entonces cuando se reveló la alarmante situación: el funcionario de la funeraria, tras buscar en la morgue de la clínica, le indicó que el cuerpo no estaba allí. Solicitaron a patología que verificara, pero tampoco hallaron rastros del cuerpo del bebé.

La madre de Joseph, al enterarse de la situación, se dirigió a la clínica, donde le informaron que debía hablar con la trabajadora social del centro asistencial. A las 6:30 p.m. , logró hablar con la funcionaria, que le reveló que el día en que Joseph murió, también falleció otro bebé de Montenegro.

Según la trabajadora social, ambas funerarias se llevaron los dos cuerpos, lo que resultó en la sepultura del bebé equivocado en dicho municipio. Sin embargo, desde la funeraria contratada le aseguraron que “eso era imposible que pasara”, explicando que la entrega de un cuerpo solo puede proceder con el acta de defunción correspondiente.

El Quindiano confirmó que el 7 de junio se realizó el entierro de un bebé en el cementerio Campo de Paz de Montenegro, pero solo de uno. Esta situación generó aún más incertidumbre, pues según la clínica, hubo un error en la entrega de los cuerpos. La patología que causó la muerte de Joseph permitía una identificación plena y distinta al otro menor fallecido, complicando aún más el escenario.

Según la madre, la funcionaria de la clínica le dijo que ese día había muerto otro bebé, por lo que era posible que se hayan confundido los cuerpos de los menores. Imagen de referencia - crédito Fernando Carranza García/Cuartoscuro.com

Las autoridades sanitarias han iniciado una investigación para clarificar los hechos. No obstante, hasta el momento no han brindado respuestas concretas. La doctora Érika Prada, gerente de la Clínica La Sagrada Familia de Armenia, fue consultada por El Quindiano, pero no ofreció declaraciones al respecto. Desde la Secretaría de Salud departamental, se limitan a informar que las investigaciones siguen en curso.

La madre de Joseph fue informada por la trabajadora social que, debido a los eventos confusos, se solicitaría permiso al párroco para desenterrar al bebé mal sepultado y así terminar con la confusión. Sin embargo, esta situación ha sido angustiosa y genera desesperación en la familia.