Alcaldesa de Jamundí pidió ayuda urgente al Gobierno tras el atentado terrorista con carro bomba

La alcaldesa de Jamundí, Paola Castillo, solicitó de manera urgente el respaldo del Gobierno nacional, en cabeza del presidente Gustavo Petro, después del acto terrorista ocurrido el pasado viernes 7 de junio en el corregimiento de Robles, en la zona rural de Jamundí, en el departamento de Valle del Cauca.

El incidente involucró la explosión de un carro bomba en el parque principal del corregimiento, cerca de una subestación de policía, lo que generó alarma entre la población local.

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Castillo enfatizó que los residentes de Jamundí, tanto en áreas urbanas como rurales, no deben vivir bajo la amenaza constante de la violencia. “No podemos permitir que nuestros ciudadanos vivan bajo el yugo del miedo, no podemos permitir que Jamundí esté atrapada en el miedo de una guerra sin sentido”, manifestó la alcaldesa en un video difundido en redes sociales.

“Hoy más que nunca necesitamos unir nuestras voces para pedir ayuda urgente al presidente Gustavo Petro y al Gobierno nacional y que de manera decidida nos permita ser municipios Zomac”, agregó Castillo.

Las zonas Zomac son áreas que reciben beneficios tributarios para incentivar el desarrollo económico. Así mismo, son lugares que han sido afectados por el conflicto armado.

La mandataria también hizo un llamado a la unidad, instando a la comunidad a alzar la voz y exigir medidas inmediatas que garanticen la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos. Reafirmó su compromiso con la paz y la prosperidad del territorio al finalizar: “Este ataque no puede ser ignorado y debemos actuar con firmeza y determinación para evitar que algo así vuelva a ocurrir, reafirmamos nuestro compromiso con la paz y con el bienestar de cada ciudadano”, añadió la mandataria local.

El evento tuvo un impacto significativo en la comunidad, reflejando la necesidad urgente de intervención estatal para evitar que la inseguridad se afiance en la región. La explosión cerca de la subestación de policía no solo causó temor entre los habitantes, sino que también destacó la vulnerabilidad de las infraestructuras críticas y de la población civil ante actos de violencia.

Una explosión ocurrida en la tarde del 7 de junio en el parque principal del corregimiento de Robles, cercano a Jamundí, en el Valle del Cauca, causó alarma entre la comunidad local. El incidente, causado por un carro bomba, produjo significativos daños materiales en la zona afectada. Sin embargo, no se reportaron heridos hasta el momento.

El estallido del artefacto provocó daños en diversas infraestructuras cercanas, incluyendo edificaciones residenciales y comerciales. Pese a la magnitud de la explosión, la comunidad se muestra aliviada por la ausencia de víctimas. Las autoridades locales reaccionaron rápidamente desplegando un operativo exhaustivo para investigar el suceso y hallar a los responsables.

Enfocados en recolectar pruebas y realizar entrevistas que permitan esclarecer los detalles del atentado, las autoridades se encuentran trabajando de manera conjunta con diversos cuerpos de seguridad. “Queremos asegurar a la comunidad de Robles y a todos los ciudadanos jamundeños que se están implementando todas las medidas necesarias para garantizar su seguridad. La protección de nuestra gente es y seguirá siendo nuestra máxima prioridad”, informó la Alcaldía de Jamundí en un comunicado.

El impacto del atentado generó una respuesta inmediata por parte del Gobierno local, que reiteró su compromiso con la seguridad ciudadana. “Continuaremos informando a los medios de comunicación, a la opinión pública y a los ciudadanos jamundeños a medida que se obtengan más detalles sobre este trágico suceso y el desarrollo del despliegue de seguridad en el territorio”, añadió en su declaración la Administración municipal.

En el transcurso de las primeras horas tras el atentado, equipos especializados evaluaron los daños materiales y recolectando cualquier evidencia posible en el área afectada por la explosión. Testigos en el sitio fueron entrevistados por las autoridades, con el fin de establecer tanto las causas de la detonación como la identidad de los responsables.

El desarrollo de la investigación será clave para entender las motivaciones detrás del atentado y garantizar que se haga justicia. Las autoridades prometieron transparencia en este proceso, asegurando que cada avance será compartido con la comunidad y los medios de comunicación.