Dane reveló la cifra de desempleo en Colombia: sigue por encima del 10%

El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) reveló que la tasa de desempleo en Colombia para abril de 2024 se situó en el 10,6%.

Este dato representa una ligera disminución respecto al 10,7% registrado en el mismo mes del año anterior. La población ocupada alcanzó los 22,86 millones de personas en abril de 2024, lo que implica una recuperación de 123.000 empleos.

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Hay una disparidad significativa al considerar el desempleo por género. Según los datos, la tasa de desempleo entre los hombres fue del 8,8%, mientras que para las mujeres esta cifra se elevó al 13,1%. Así, la brecha de género en el desempleo se mantuvo en 4,2 puntos.

Estas cifras subrayan la continuidad de las disparidades de género en el mercado laboral colombiano. El Dane ha señalado repetidamente la necesidad de políticas que aborden estas desigualdades estructurales. La situación laboral de las mujeres requiere atención especial para cerrar esta brecha, dato que resalta la persistencia de desigualdades estructurales en el mercado laboral.

Además, la disminución en la tasa de desempleo del 10,7% al 10,6% podría parecer marginal a primera vista, pero ocurre en un contexto de esfuerzos continuos de diversos sectores para aumentar las oportunidades de empleo y mejorar las condiciones laborales. Sin embargo, el número absoluto de desempleados sigue siendo una preocupación significativa, y esta ligera mejora debe considerarse dentro de un panorama más amplio y complejo.

La población desocupada experimentó una disminución significativa en abril de 2024, con una reducción de 8.000 personas en comparación con el mismo mes del año anterior, según informó el Dane. Este descenso deja el número total de 2,72 millones de desocupados.

Es importante resaltar que la tasa de desempleo y la desocupación son conceptos relacionados, pero no son exactamente iguales. La tasa de desempleo mide la cantidad de personas cesantes en relación con la población económicamente activa, es decir, las personas que están en edad y capacidad de trabajar y buscan trabajo activamente.

Por su parte, la desocupación es un término más amplio que se refiere a las personas que no tienen empleo y están disponibles y dispuestas para trabajar. Incluye tanto a quienes buscan activamente trabajo como a quienes no lo buscan pero están disponibles para hacerlo. La desocupación se mide en relación con la intención de trabajar, no solo con la población económicamente activa.

En cuanto a la población por sexo, se observó una notable variación. La cantidad de mujeres desempleadas disminuyó en 75.000, mientras que el número de hombres desempleados aumentó en 67.000 durante el mismo periodo.

Además, el Dane reportó un incremento en la población fuera de la fuerza laboral. En abril de 2024, esta cifra aumentó en 459.000 personas, lo que representa una variación del 3,3% respecto al mismo mes de 2023.

Las actividades financieras y de seguros destacaron en la recuperación de empleos en abril, con un incremento de 77.000 nuevos puestos. Este rubro lidera la lista de ramas que mostraron mejoras significativas, seguido por las actividades profesionales y científicas, que tuvieron una adición de 63.000 trabajadores, y el sector de alojamiento y servicios de comida, que empleó a 62.000 personas más.

El comercio y la reparación de vehículos introdujo 52.000 nuevos empleos, mientras que la administración pública y defensa generó 49.000 puestos adicionales. En cuanto al transporte y almacenamiento, se registraron 19.000 empleos nuevos en dicho sector. Estos datos retratan una tendencia positiva en varios sectores económicos clave, lo que indica una recuperación notable del mercado laboral.

Sin embargo, ciertas ramas experimentaron pérdidas de empleo en abril. El sector agropecuario sufrió una contracción significativa, disminuyendo en 109.000 trabajadores. Asimismo, las industrias manufactureras enfrentaron una reducción de 93.000 puestos de trabajo, y el sector de Información y Comunicaciones perdió 14.000 empleos.

Otros sectores afectados incluyen las actividades inmobiliarias, que registraron una baja de 7.000 empleos, y el sector de la construcción, con una pérdida de 3.000 puestos de trabajo.

Según el Dane, Quibdó registró la tasa de desocupación más alta en el país con un 28,6%. Riohacha y Florencia siguen en la lista con tasas de 20,1%y 17,1%, respectivamente. Villavicencio destacó como la ciudad con la menor tasa de desocupación en el mismo periodo, logrando un 9,8%. Bucaramanga y Santa Marta se ubicaron en los segundos lugares con 9,6% cada una.