Ya son cinco las personas que murieron y dos las que resultaron heridas en el accidente registrado el 31 de mayo en el puente de la calle 30, que conecta a Barranquilla con el municipio de Soledad (Atlántico). Uno de los ciudadanos que resultó afectado es Luis Alfonso Llanos Ferrer, un comerciante de 49 años que iba en una camioneta Suzuki 4x2, que fue a parar al cráter que se formó en el corredor vial.
Su hijo, Luis Alfonso Llanos, relató los angustiosos momentos que vivió luego de enterarse de que su padre se había accidentado en horas de la madrugada. “Yo estaba dormido y mi mamá me llamó (y me dijo) que mi papá había tenido un accidente”, contó el joven, en conversación con El Tiempo.
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Alertado por la situación, se dirigió al sitio del accidente junto con otros familiares. Cuando llegaron, pasadas las 3:00 a. m., el lugar estaba muy oscuro, pero lograron acercarse al inmenso cráter de siete metros de profundidad, aproximadamente. Se les vio perseguir a un agente de la Policía de Tránsito para recibir información sobre lo sucedido, pues en ese momento no se había mencionado nada sobre las víctimas.
Estando en el punto del desplome, supo que su padre seguía abajo, atrapado. Sin embargo, antes de que se aventurara a rescatarlo, su padre logró ser puesto a salvo. “Estuve a punto de lanzarme de aquel lado, pero mi mamá alcanzó a decirme que ya lo habían sacado del otro”, relató el hijo de Luis Alfonso Llanos Ferrer.
El hombre logró ser tras trasladado en una ambulancia hasta la clínica Centro, ubicada en Barranquilla, para atender con urgencia sus heridas. Según afirmó el joven al medio citado, su padre ya fue atendido y los profesionales de la salud adelantaron algunos estudios para evaluar su estado de salud. Por ahora, continua en observación y, al parecer, las afectaciones que sufrió no son de gravedad. “Aparentemente, solo son golpes”, detalló.
Los organismos de socorro se encargaron de auxiliar a las personas heridas y de sacar los cuerpos de los fallecidos en el accidente, pero también contaron con la ayuda de ciudadanos que se sumaron a las labores de rescate. Una de las personas que brindó su apoyo es Wilder Rafael Monsalve, que alcanzó a sacar a tres personas con vida y dos cadáveres. Uno de los heridos falleció en un centro médico.
“Yo venía subiendo el puente hacia Soledad a buscar un servicio y a mitad del puente de la 30 se bajó eso. Venían pasando dos carros y una moto; yo orillé (sic) mi carro y fui a ver; vi que el señor de la moto pedía auxilio, una señora de un carro también pedía auxilio y yo haciendo lo posible llamé tres veces a los bomberos (sic). Me bajé con un policía en una cuerda para ayudar a las personas que estaban heridas”, detalló el ciudadano, en conversación con Emisora Atlántico.
La discusión sobre el estado de la vía
El accidente ha generado un debate sobre las razones por las cuales se desplomó el puente y si había manera de evitarlo. El joven Luis Alfonso Llanos manifestó a El Tiempo su indignación por la aparente falta de cuidado de la estructura que, desde su perspectiva, fue la causando de lo ocurrido.
“La situación es más que eventual, si es mantenimiento o no, yo creo que es prevención, porque si hubiese hecho un estudio pertinente, este tipo de accidentes no ocurren. No hay un control, no hay un ente que mantenga un régimen sobre lo que sería el cuidado adecuado de la infraestructura que se presenta”, sostuvo.
Sin embargo, el ministro de Transporte, William Camargo, aseguró a varios medios de comunicación que la hipótesis principal que se maneja al respecto es que hubo una saturación del terraplén. Al parecer, un incremento de agua hizo que la estructura perdiera soporte. “Se crea un vacío, y al momento que pasan vehículos, la estructura colapsa”, detalló.
Añadió: “La evaluación que está documentada en informes preparados por el equipo de la ANI e Invías no evidenciaba una falla estructural o un peligro sobre las estructuras que conforman esta intersección: los puentes, los terraplenes y las orejas y conectantes. Lo que se recomendó fue un proceso de mantenimiento y rehabilitación para garantizar condiciones de seguridad”.