La Cámara de Representantes le puso el freno final y definitivo a las corridas de toros en Colombia, al aprobar el martes 28 de mayo en último debate el proyexcto de ley que busca la prohibición nacional de las tauromaquia, con 93 votos a favor y dos en contra.
La decisión fue aplaudida por el mayor impulsor del auto, el representante liberal Juan Carlos Losada, quien hace parte de la bancada animalista de los funcionarios legislativos del país. “Aquí hay un país que dice que ninguna tortura se regula, se prohíbe (…) nos volvemos una sociedad menos violenta y más civilizada, hoy damos un salto cuántico en el respeto por la vida”, dijo, tras la victoria.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
Sin embargo, las reacciones no fueron todas en favor de la nueva prohibición, pues en lo ojos de quienes han hecho parte de la tradicional práctica, la restricción es un “atropello a la libertad”. O, al menos, es la opinión del afamado lidiador colombianos César Rincón, que en la actualidad es un ganadero de Las Ventas del Espíritu Santo, en Albán, Cundinamarca.
Sus críticas a la decisión del Congreso se han dejado ver a través de algunas entrevistas concedidas a los medios. De acuerdo con unas declaraciones dadas por la máxima figura del espectáculo taurino que se emitieron en Caracol Radio, la novedad no solo es un atropello, sino que “todos los toros que hemos criado irán al sacrificio”.
“La decisión de la Cámara de mi país me parece un atropello a la libertad, al derecho, a la libre determinación, al derecho al trabajo y al animalismo. ¿Qué pasará con los toros? Todos esos animales que nosotros durante años hemos cuidado ahora no tienen”, dijo en el medio radial.
“Es una tristeza muy grande (...) Estoy desolado”
César Rincón ha manifestado que no puede evitar sentir una profunda tristeza, ya que no solo por su carrera, siempre ha defendido fervientemente la tauromaquia y la libertad cultural en el país, de modo que la reciente noticia es “la crónica de una muerte anunciada”, en sus palabras.
De acuerdo con lo que se citó en el portal Mundo Toro, para el matador “es una tristeza muy grande”, que “aunque uno no lo quiera aceptar. No tengo palabras, estoy muy triste”, dijo.
La aprobación de esta ley llegó en momentos polémicos para Colombia, lo cual ha hecho que César Rincón considere que la prohibición constituye una maniobra del Gobierno para desviar la atención de otros asuntos más urgentes. “Era inminente la aprobación de esta ley como cortina de humo, para tapar la cantidad de escándalos que tiene este país (...) Un país que prohíbe es un país menos libre, más dictatorial”, explicó el torero.
La reconversión económica de quienes dependen de la tauromaquia
Rincón destacó que la desaparición progresiva de plazas de toros y ganaderías no es un suceso reciente. “Ha sido una muerte lenta. Se han ido cerrando muchas plazas de toros, las ganaderías han ido desapareciendo y se ha ido perdiendo la afición. Cuando no hay pueblo, al final no hay nada”, comentó. Inclusive, también atribuyó esta situación al creciente movimiento animalista y la falta de reacción social. “Los animalistas han ido ahogando al toreo y esto no es de ahora, lleva pasando mucho tiempo. Es como cuando una madre avisa del peligro a su hijo, éste no le hace caso y luego pide explicaciones”.
El lidiador más destacado del país también reconoció que la medida afecta negativamente a las familias que dependen de esta actividad; no obstante, quienes impulsaron la prohibición destacan la posibilidad de la “reconversión”.
La Cpamara de Representantes puntualizó que “uno de los puntos más resaltados por quienes se opusieron al proyecto es que la prohibición podría impactar a las familias de quienes viven del toreo. Por esta razón, iniciando el debate, el representante Christian Garcés, del Centro Democrático, presentó una proposición que fue negada, que buscaba crear una comisión encargada de buscar alternativas en la regulación. «No se puede simplemente prohibir porque aquí se generan empleo»”.
No obstate, el ponente de la ahora ley, el representante del Partido Verde, Alejandro García Ríos, dijo que “a los taurinos les decimos que participen de la reconversión, hay oportunidades en este proyecto. A Manizales y Cali, esto es una oportunidad para que estas ciudades y estos espacios subutilizados puedan ser lugares de cultura, arte, deporte y conciertos. Al país le decimos que se prioriza el bienestar animal y al mundo que Colombia está en un proceso de transformación cultural con dignidad por todos los seres vivos”.
Mientras tanto, los toreros consideran que la decisión del Congreso es un golpe brutal para su profesión y para otros trabajadores del sector. Manuel Libardo, torero de Ubaté, citado por el portal de informatción taurina Tendido7, calificó la situación como “terrible”. Juan Carlos Gómez, vocero de Cormanizales, a su vez, mencionó que la imposibilidad de realizar corridas afectará los recursos destinados al hospital infantil de la ciudad.
“Nosotros en un país libre optamos por ser toreros, ejercemos una profesión legalmente amparada (a partir de esta ley ya no) y nos dejan sin sustento al igual que a banderilleros, picadores, sastres, artesanos, mayorales, vaqueros”, dijo Manuel Libardo.