Las autoridades locales incautaron 12 escorpiones venenosos de la especie Opistacanthus elatus, que estaban destinados a la elaboración casera de potenciadores sexuales. Este hallazgo se realizó durante un operativo de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y la Policía Ambiental en una calle de Chiquinquirá en el departamento de Boyacá.
De acuerdo con Yiber Esteban González, director regional de la CAR, la intervención comenzó tras recibir una denuncia ciudadana. “A partir de una queja realizada por un usuario, se hizo el recorrido dentro de la ciudad, donde se identifica a un individuo que realiza la comercialización de productos que son generados a base del veneno de escorpión”, precisó González.
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Durante el operativo, el responsable de los escorpiones afirmó desconocer la ilegalidad de su posesión. Los escorpiones han estado amenazados por la “extracción ilegal e indiscriminada del medio, para la elaboración de objetos artesanales o ‘souvenirs’”, según el Libro Rojo de los Invertebrados terrestres de Colombia. Por otra parte, la CAR informó que, tras la incautación, un especialista evaluó a los arácnidos para iniciar su proceso de retorno a su hábitat natural. La entidad reiteró que “cada especie pertenece a su hábitat natural y no debe ser utilizada con fines comerciales o domésticos”.
Por último, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca insta a la comunidad a reportar cualquier acción que pueda desencadenar en delitos ambientales. La solicitud puede ser enviada por medio del correo sau@car.gov.co, llamada al teléfono 601 580 11 11, mediante la aplicación ApliCAR, o en los puntos de atención al ciudadano distribuidos en las 14 direcciones regionales de la entidad.
Sobre el arácnido
El escorpión Opistacanthus elatus es una especie que se encuentra en diversas regiones de Colombia. Pertenece a la familia Scorpionidae y se caracteriza por su tamaño mediano y su color marrón oscuro. Estos escorpiones habitan principalmente en áreas tropicales y subtropicales del país, prefiriendo ambientes húmedos y protegidos, como debajo de troncos y rocas en zonas boscosas. Su veneno generalmente no es peligroso para los humanos, pero puede causar dolor localizado e inflamación. Los científicos están estudiando su veneno por sus posibles aplicaciones biomédicas, incluyendo su potencial en la investigación de medicamentos.
Investigadores han descubierto que el veneno de escorpión podría tener propiedades que potencian la función sexual. Un estudio reciente sugiere que ciertas toxinas presentes en el veneno de escorpión pueden actuar como vasodilatadores, mejorando el flujo sanguíneo. Este efecto podría ser comparable al de algunas medicaciones usadas para tratar la disfunción eréctil. No obstante, los científicos advierten que se necesita más investigación para confirmar estos hallazgos y determinar la seguridad y eficacia del uso del veneno de escorpión en tratamientos médicos.
Sanciones contra el tráfico ilegal de fauna
Cabe recordar que, según el Código Penal de Colombia, se establecen severas sanciones para combatir el tráfico ilegal de fauna. Las penas para aquellos que “trafiquen, adquieran, exporten o comercialicen sin permiso de la autoridad competente” especies de fauna acuática, silvestre o exótica pueden variar desde 60 hasta 135 meses de cárcel, además de multas que van de 300 hasta 40.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
Esta normativa responde a la necesidad de proteger la biodiversidad y prevenir la extinción de especies. Las autoridades buscan disuadir estas actividades ilegales debido a su impacto negativo en el medio ambiente y la fauna. Para ello, se ha establecido un mecanismo de denuncia a través de las líneas de emergencia 123 y 122 de la Fiscalía, así como el contacto con la autoridad ambiental más cercana.