Migrante en Miami se quejó del clasismo de los colombianos, incluso en Estados Unidos: “Tú no eres más que yo”

La joven insistió que el estrato y apellido siguen pesando en la balanza social de los colombianos, incluso, viviendo en el exterior

Carolina se mostró contrariada por encontrarse con este comportamiento incluso en el exterior - crédito @carolinaforero_ / TikTok y DeviantArt

Llegar a Miami, en la costa este de Estados Unidos, no evitó que la colombiano Carolina Forero siguiera encontrándose con las mismas barreras sociales que mantienen la separación de clases en su país.

Incluso, con una situación económica similar a la de otros nacionales que tomaron la decisión de migrar para acceder a oportunidades laborales más atractivas, hay quienes siguen apartándola y “mirándola por encima del hombro” por sus orígenes humildes.

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Así lo habría dado a conocer en una serie de videos que compartió a través de la plataforma de entretenimiento china Tiktok, preguntándoles a otros colombianos si han tenido que lidiar con situaciones similares en el extranjero y a qué responde esta actitud.

Al migrar, Carolina jamás pensó que volvería a encontrarse con este comportamiento - crédito @carolinaforero_ / TikTok

Estoy cansada del clasismo colombiano y que me persiga, incluso, estando en Miami. Es increíble que haya conocido a personas de todo el mundo: México, Haití, Cuba, Venezuela, Ucrania, Estados Unidos y que los únicos que se piensen superiores por tener un apellido o por haber pertenecido a una clase social”, sean colombianos.

Forero dijo estar harta y no entender “cómo es posible que llegara y conociera a un grupo de colombianos que me hicieran sentir inferior estando en una situación económica estable, con ingresos como nunca, y aun así, se sintieran mejores que yo por no hablar como una ‘fresa’ o por no tener conversaciones banales acerca de dónde es mi ropa o cuál es la marca de mi bolso”.

Sus posibilidades económicas en Colombia siempre fueron limitadas, pero desde pequeña entendió que, como bien reza la Declaración Universal de los Derechos Humanos, todos somos iguales, sin distinción alguna de “raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición”.

Al migrar, Carolina jamás pensó que volvería a encontrarse con este comportamiento - crédito @carolinaforero_ / TikTok

Sin embargo, también dijo ser “consciente de este dilema social porque, desde que tengo memoria, viví en una zona de estrato dos, lo que se considera muy pobre, pero yo nunca lo vi así porque no pasé necedades. Sí, mi madre fue cabeza de familia, docente de colegio público, pero nunca nos faltó nada”.

Con su salario, logró mantener a Carolina y sus hermanos, brindándoles educación de calidad hasta que se graduaron de la universidad, a pesar de que jamás cedió a sus caprichos ni pudo pagar viajes excéntricos o prendas de diseñador.

De hecho, Forero estuvo rodeada durante gran parte de su infancia y juventud por estudiantes a los que su madre dictaba clase en los colegios oficiales. “Eran niños en condiciones precarias, con problemas familiares, de violencia en el hogar, alimentación”, pero jamás se sintió superior a ellos.

Desde pequeña, Carolina aprendió a no diferenciar a las personas por su poder adquisitivo - crédito visuales IA

De ahí que siga sin entender cómo, al mudarse a Miami con 30 años o más, pueda encontrarse “con un choque social en el que otro colombiano se sienta más que yo. Es absurdo que sigan con eso. Tú no eres más que yo y yo no soy más que tú, por la clase social o el estrato al que pertenencias”. Un desconcierto que otros colombianos, según se lee en los comentarios de su video, comparten:

“Por eso es que, siendo colombiana, no tengo amigos colombianos”, “Personas con ego de reyes hay en todas partes. No deberíamos dejarnos afectar por ellos y concentrarnos en cultivar un amor propio”, “Son cosas que, lamentablemente, se ven en Colombia y no en países del norte del continente o Europa: que te pregunten por tu estrato, colegio o universidad”, “Cierto... llevo 25 años fuera de Colombia y siempre me encuentro con gente así. Es lo único que no echo de menos de mi país”.