En una enérgica defensa de los miembros de la primera línea, que jugaron un papel clave durante el estallido social que se registró en el país a mediados de 2021, el presidente de la República, Gustavo Petro, volvió a desatar una tormenta mediática. Y todo por la llamativa comparación que hizo el mandatario del origen de estos manifestantes, algunos de ellos presos, acusados de hechos vandálicos durante las protestas.
Durante la sesión conjunta con Consejeros de Juventud, Plataformas de Juventud y Jóvenes en Paz, efectuada en el Centro Nacional de las Artes Delia Zapata Olivella, el mandatario de los colombianos se refirió al estrato social de los integrantes de estos colectivos. E insinuó que si tuvieran otra cuna en su formación o nivel socioeconómico, tal vez –a su juicio– hubieran tenido un trato diferente por parte de la justicia y la sociedad, pues está convencido de que fueron estigmatizados por sus formas.
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“¿Y entonces quiénes eran los de la primera línea? Pregúntenle a cualquier medio de comunicación. Quiénes eran los de la primera línea… Terroristas, dicen. Y ustedes, que estuvieron en esos barrios o vivieron alguna vez el tema, todos lo sabían que ahí había problemas iguales, obviamente problemas de la juventud popular, pero no eran terroristas”, inició Petro en su defensa de estos grupos de protestantes.
Pullazos a Iván Duque por la primera línea
Según el primer mandatario, dichos jóvenes estaban manifestándose “para vivir”, por lo que se cuestionó por la respuesta del Estado en ese entonces, a cargo de su antecesor, Iván Duque Márquez: que afrontó las movilizaciones registradas entre el 28 de abril y finales de junio, y en las que se registraron graves alteraciones de orden público, al igual que múltiples lesionados.
“Ahí están las estadísticas, fue la muerte. Ahora: si esos jóvenes hubieran sido los del Liceo Francés, mis hijos, o el Gimnasio Moderno, o como se llame...o etcétera, y hubieran salido por alguna razón a protestar –y ojalá algún día lo hagan–, ¿los hubieran tratado igual? Probablemente no”, señaló el jefe de Estado, que agregó que con ese tipo de conductas es cuando se mide la exclusión que afecta a Colombia.
En concepto de Petro, la exclusión queda en evidencia cuando se menciona acerca de “quiénes tienen derecho a vivir y quiénes no”, por lo que enfatizó su posición a que este tipo de casos llevan a pensar que no hay democracia y no hay república. “Está todo por construir, y lo digo aquí, porque la juventud pasa por generaciones y cambia de acuerdo a la historia, han pasado por fases diferentes”, remarcó el presidente.
Durante su Gobierno, el primer mandatario ha buscado la liberación de los integrantes de la primera línea, por diferentes mecanismos de tipo jurídico. Un propósito que quedó establecido el 10 de mayo, cuando el ministro de Justicia, Néstor Osuna, trasladó a la Fiscalía General de la Nación de dejar de imputar los actos de la protesta como hechos propios del terrorismo.
“Ahora, con la nueva fiscal (Luz Adriana Camargo), estamos trabajando. Y sé que muy pronto va a expedir la directriz en la que se afirma que los hechos de protesta social no son ni terrorismo, ni concierto para delinquir”, manifestó Osuna sobre esta propuesta, que estaría encaminada a proteger, según el miembro del gabinete de Gobierno, los derechos de los ciudadanos.
Es válido resaltar que en la sesión conjunta se habló sobre la Asamblea Nacional de Juventud y Participación Juvenil, la reforma del Estatuto de Ciudadanía Juvenil, el fortalecimiento al plan de incentivos y las acciones sobre violación de derechos humanos y garantía de vida para líderes juveniles, como estaba contemplada en la agenda de la jornada.