Álvaro Uribe dijo que la democracia en el Gobierno Petro terminará como “un carro en pérdida total”: encendió motores para las elecciones de 2026

El exmandatario y líder del Centro Democrático, Álvaro Uribe Vélez, encendió las redes sociales después de publicar un mensaje en el que intensificó sus críticas hacia el actual Gobierno de Gustavo Petro.

En su intervención, Uribe comparó la situación del país con un vehículo que se dirige hacia una “pérdida total” de cara a las próximas elecciones de 2026.

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Según comentó el expresidente, las reformas y el manejo del orden público que se ha dado por parte del Gobierno están provocando un “siniestro total” del vehículo que representa a la patria. “Si asimilamos la patria a un vehículo, todo este manejo del Gobierno, sus reformas, el orden público, todo, está produciendo un siniestro total del vehículo. ¿Cómo lo vamos a recuperar en el 26?”, cuestionó Uribe en un video compartido en su cuenta de X.

Además, el exmandatario afirmó que para las próximas elecciones presidenciales se deberán buscar alternativas para reemplazar lo que, según él, dejará el Gobierno del Pacto Histórico. “¿Cómo lo vamos a sustituir? ¿Cómo curaremos a Colombia de este gran problema del estatismo destructor? Esto que a todos los empobrece”, añadió.

De hecho, Uribe propuso caminos alternativos que estén fundamentados en el emprendimiento privado, la equidad social y las libertades, y se refirió específicamente al proyecto de reforma a las pensiones que actualmente intenta salir a flote en el Congreso de la República.

Incluso, el exmandatario hizo especial énfasis en la importancia de un Gobierno que promueva la austeridad y el crecimiento económico para garantizar ingresos a quienes no tienen pensión. “Colombia en el 2026 necesita un Gobierno que con austeridad y crecimiento económico sea capaz de garantizar ingresos a quienes no tienen pensión; que formalice la economía dando confianza al emprendimiento; y, que permita que el sector privado maneje las reservas pensionales para evitar el riesgo del derroche estatal”, manifestó.

Las palabras de Álvaro Uribe fueron tomadas por los internautas como el arranque de la contienda electoral que se avecina en 2026 y que podría ser ganada por la oposición, tras los recientes escándalos que envuelven al Gobierno nacional, incluida las polémicas por la compra de carrotanques por parte de la Ungrd y la violación de topes de campaña de Gustavo Petro en 2022.

Además, el expresidente también se pronunció en un momento en el que ya empiezan a sonar nombres de posibles candidatos para las elecciones presidenciales de 2026. Entre los postulados por el Centro Democrático destacan los nombres de María Fernanda Cabal, Miguel Uribe y Paloma Valencia, con quienes podría aplicar su iniciativa de instaurar un mandato con un enfoque distinto al actual, centrado en la austeridad y el crecimiento económico.

Los hechos de corrupción presuntamente ocurridos en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) continúan siendo un tema de debate en Colombia, particularmente en el Congreso de la República, donde se discuten las reformas sociales propuestas por el Gobierno de Gustavo Petro.

El exmandatario Álvaro Uribe Vélez expresó en su cuenta de X serias preguntas sobre los treinta congresistas que supuestamente habrían sido sobornados por la Ungrd: “¿Quiénes serán los 30 congresistas sobornados? ¿Los mismos que están aprobando las reformas de la destrucción democrática?”, señaló.

Estas declaraciones se hicieron tras las revelaciones del exsubdirector de la Ungrd, Sneyder Pinilla, quien indicó que numerosos legisladores podrían haber recibido sobornos para apoyar las reformas del gobierno.

Además, el exdirector de la Ungrd, Olmedo López, afirmó a Semana que quince senadores habrían sido beneficiados con comidas con el mismo objetivo. Frente a esta situación, Uribe instó a que los congresistas involucrados fueran removidos de sus funciones o a que el Congreso entrara en “auto huelga”.

En otro aspecto, Uribe manifestó su descontento con la reforma laboral planteada por el gobierno, argumentando que no beneficiaría a los trabajadores y podría agravar las condiciones laborales en el país. Según Uribe, esta reforma podría aumentar el desempleo y la informalidad laboral, contrariamente a los objetivos propuestos por el ejecutivo.