Intervención divina: ni dos horas estuvo en manos del hampa el cristo de una iglesia que fue desocupada en Armenia

Ni dos horas estuvo en manos del hampa la estatuilla del cristo crucificado que adorna la capilla auxiliar en la catedral de La Inmaculada Concepción de Armenia. Lo anterior, luego de que la escultura fuera robada por un hombre que logró colarse y tomar cuanto pudo antes de ser descubierto, en el transcurso del viernes 10 de mayo.

Su desaparición, sin embargo, no tardó en alertar a los creyentes, que se pusieron en contacto con la administración de la iglesia y esta, a su vez, con la Policía para poner en marcha un plan de rastreo y dar con el responsable.

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Actuar con rapidez habría jugado a su favor y es que, alrededor de hora y media más tarde, ya tenían en su poder la estatuilla que, con júbilo, regresó el comandante de la Policía del departamento al párroco.

“En Armenia se logró recuperar una valiosa imagen de Jesús crucificado, sustraída de la catedral. Gracias a una rápida acción e investigación, se pudo devolver esta reliquia a la comunidad”, celebró el Departamento de Policía del Quindío en una publicación, realizada a través de su cuenta en la red social X (antes conocida como Twitter).

Y el comandante complementó: “Realmente, me complace mucho venir cuando, hace menos de hora y media fuimos objeto de una situación que no debería ocurrir. Se había hurtado la imagen del señor crucificado y, en una acción oportuna de los funcionarios de nuestra estación de Armenia, logramos su recuperación, afortunadamente en perfecto estado”.

Un logro, que sin duda, para la iglesia, la comunidad del sector de Guayaquil y los cristianos que tienen fe en este tipo de representaciones, que, desde siempre, dan un toque característico a cada iglesia.

Durante el segundo fin de semana festivo de noviembre del 2023, se reportó un robo en la casa cural del barrio El Amparo, en Valledupar, mientras los residentes asistían a la misa dominical.

Un ladrón, meticulosamente vestido de civil, se infiltró en la propiedad para sustraer varios dispositivos electrónicos. Las cámaras de seguridad captaron el acto delictivo, evidenciando cómo el intruso se movía con cautela para evitar encontrarse con los residentes o trabajadores del lugar.

El sospechoso logró llevarse dos celulares y un computador portátil, almacenándolos en una mochila antes de huir del lugar. Los detalles del incidente fueron rápidamente compartidos por la parroquia afectada a través de sus canales, incitando una ola de reacciones en redes sociales.

Las opiniones, sin embargo, se dividieron entre aquellos que condenaban el acto, sugiriendo que el ladrón enfrentará no solo consecuencias legales sino también “la ira de Dios”, y otros que argumentaban que, dada la creciente ola de criminalidad, un suceso así era previsible.

Este incidente resalta un problema mayor en torno a la seguridad en lugares de gran concurrencia y la importancia de medidas preventivas más estrictas. La comunidad de Valledupar y El Amparo se mantienen en alerta ante la posibilidad de futuros incidentes similares, mientras las autoridades fueron llamadas a revisar y fortalecer las estrategias de vigilancia y protección para los bienes e inmuebles de la localidad.

“Quedó registrado... Que caiga”, “Y bien vestido”, “Ya en otra ocasión, este sujeto robó en otra parroquia, la de mi barrio fundadores se escapó que fuera saqueada por este individuo, porque fue descubierto a tiempo, gracias a Dios”, “Si realmente ese tipo conociera el corazón del padre Miguel Ávila de seguro no tendría la necesidad de hacer lo del video”, “Cuál es la alarma porque robaron una iglesia? Acaso no roban en todos lados, a toda hora a todo el mundo? Lo raro es que no lo hicieran antes!!!”, “Es robarle a Dios y de ese juicio no se escapa”, se lee en las reacciones del video, compartido a manera de denuncia.