Wilfran Castillo, reconocido por ser el autor detrás de grandes éxitos como Hoja en blanco, Que no me faltes tú, Si tu amor no vuelve, y Quiero saber de ti, se encuentra bajo la mirada publica después de que revelara las cifras millonarias que puede llegar a cobrar por tema.
Según sus declaraciones en una reciente entrevista realizada por el presentador Frank Solano de Olímpica Stereo, el compositor defendió sus precios, argumentando que estos se ajustan al perfil y al proyecto del artista que solicita su obra.
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La política de precios de Castillo responde a un criterio que él mismo describe: “Eso depende de la categoría del artista. Yo jamás le cobraría a Silvestre Dangond, a Jorge Celedón, a Felipe Peláez”.
Sin embargo, el cantante habló de como el negocio de la música ha cambiado y hay factores como el prestigio del intérprete y las inversiones detrás de cada proyecto musical que influyen en su tarifa: “Ya la música se volvió un negocio y hay proyectos financieros, hay fondos de inversión (...) Nunca he cobrado por una canción, pero si un artista me pregunta cuánto cobro, la respuesta varía entre 80 y 100 millones de pesos, dependiendo el grado de inversión que tenga”, reveló el compositor.
“A mí me han pagado 80 millones por una canción, tengo que decirlo así, no es un pacto que se hace público, pero sí ha pasado. De hecho, he cobrado hasta 70 mil dólares por una canción producida y me los han pagado, pero no es cosa que pasa todos los días”, añadió Castillo.
Uno de los aspectos más discutidos en las redes es sobre los compositores que cobran altas sumas de dinero y la dificultad que enfrentan los artistas nuevos para acceder a sus obras, dado que no todos pueden acceder a pagar cifras millonarias.
Ante el cuestionamiento anterior, el artista argumentó que su tarifa no solo se justifica por el renombre del artista, sino también por el valor inherente a su trabajo y el potencial retorno económico de sus canciones. “Si canta muy bien, yo no le cobraría”, admito, sugiriendo que no solo el dinero influye en su decisión, sino también la calidad y el potencial de quien interprete sus obras.
“Hay otros artistas que no representan una garantía en vos para el autor, entonces hay que cobrarle 70 (millones) o más (...) hablo de como cuando tú tienes un producto y tú dices yo puedo ponerlo en esta tienda que es buena o puedo ponerla en la mejor, obviamente tú te dices yo mejor guardo esta canción y se la entregó a Peter, a Felipe, a Jorgito, a Silvestre, a Jean Carlos, pero si viene alguien que pretende con esa canción enriquecerse, ganar dinero, yo le voy a decir: ‘Ven acá, ya que tú me preguntaste cuánto cobro por canción. Yo te cobro 80 millones”, agregó el cantante oriundo de Valledupar, César.
Aunque Castillo indicó que en algunos casos particulares muestran su comprensión con artistas emergentes, entonces ofrece condiciones más favorables a cantantes con menor presupuesto o les entrega sus letras para que puedan trabajar en su carrera.
La opinión pública en las redes sociales se dividió, mientras algunos apoyan el derecho del compositor a valorar su talento, otros critican la altas tarifas: “No joda, qué vaina cara”; “yo cobraría 30 millones de pesos”; “Yo cobraría también toda esa plata, mi imaginación cuesta, además el cantante es quien se va a lucrar con esta canción”; “No entiendo porque se asustan si cobran x dinero si la música siempre a sido un negocio sólo ahora es más evidente que antes”, son algunos de los comentarios del debate que se inició en las redes sociales.