La Fiscalía General de la Nación logró enviar a prisión a Jorge Eliecer Narváez Agresoth, conocido por los alias Jorgito o More. Se le atribuye ser un presunto sicario de la facción Arístides Meza Páez, del Clan del Golfo, que tiene fuerte presencia en la región de la Costa Atlántica.
Este individuo, según el ente acusador, tendría un papel crucial en el componente armado del grupo y estaría implicado en varios homicidios selectivos ejecutados en el último año en diversos municipios del departamento de Sucre.
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La notoriedad de Jorgito en el mundo del crimen se ha cimentado en la realización de actos violentos efectuados en la vía pública y de manera premeditada contra individuos que, en su mayoría, se encontraban acompañados de sus familias o amigos, y que, al parecer, se habrían opuesto a las actividades ilícitas del Clan del Golfo o fueron señalados por apoyar a facciones rivales.
Un juez con función de control de garantías dictó medida de aseguramiento contra Narváez Agresoth tras la solicitud de la Fiscalía. Esta acción se fundamenta en las acusaciones formales presentadas contra el sospechoso, entre las que se incluyen concierto para delinquir agravado y homicidio agravado, cargos que Jorgito ha decidido no aceptar.
La investigación conducente a estas acusaciones ha permitido, por ahora, verificar al menos tres muertes violentas directamente relacionadas con este individuo. Este proceso destapó el modus operandi de los sicarios bajo el manto del Clan del Golfo, y cómo sus acciones han sembrado el terror entre la población de la región, atacando a sus víctimas en estado de indefensión y sin dar margen a ninguna forma de protección o defensa.
Golpe de las autoridades al narcotráfico: incautaron el cargamento de heroína más grande de los últimos años
En otro importante logro de las autoridades colombianas, la Policía Nacional de Colombia, la Fiscalía General de la Nación, la DEA y el Ejército Nacional lograron la incautación de 53,5 kilos de heroína en una casa rural del corregimiento de Santa Fe, en Buesaco, Nariño. Esta acción evitó la distribución de cerca de 860 mil dosis de este narcótico, destinadas inicialmente a Guayaquil, Ecuador, con el fin de ser posteriormente trasladadas al mercado estadounidense.
Durante el operativo se descubrió que el alcaloide estaba destinado a ser empaquetado en dediles, una táctica de camuflaje, para su trasporte a través de rutas terrestres irregulares cercanas a la frontera.
La carga incautada tiene un valor estimado de 802 millones de pesos en la zona de producción, incrementándose hasta los 3,7 millones de dólares una vez alcanza el mercado internacional. Esta operación destaca por la colaboración binacional con Ecuador en la lucha contra el narcotráfico, identificando la potencial implicación de una organización criminal transnacional que utilizaba etiquetas con el logo de un equipo deportivo de Guayaquil, de las cuales se confiscaron aproximadamente mil unidades.
Los informes policiales subrayaron el interés de grupos criminales por establecer a Buesaco como un centro clave para la producción y el tráfico de heroína, aprovechando su altitud y terreno complejo, que facilita el cultivo de amapola y la elaboración del narcótico. El general William René Salamanca Ramírez, director general de la Policía Nacional, enfatizó que la operación forma parte de una ofensiva integral contra el narcotráfico que se ejecuta en la frontera con Ecuador en cooperación con la DEA.
Esta incautación se suma a otros importantes decomisos realizados a nivel nacional, con más de 3.400 kilos de marihuana y cocaína incautados en distintos puntos del país. Entre ellos, operativos que resultaron en la captura de tres personas y la incautación de 2.300 kilos de marihuana tipo creepy en dos acciones diferentes, así como la intercepción de 1.039 kilogramos de clorhidrato de cocaína por parte de la Armada Nacional en una operación marítima.
A la fecha, la incautación acumulada de marihuana asciende a 189 toneladas, lo que representa un golpe significativo contra las finanzas de las organizaciones criminales involucradas en el narcotráfico.