Menores escaparon de una disidencia que los reclutó forzadamente

Los menores decidieron escapar ante los malos tratos a los que estaban siendo sometidos por una de las estructuras del EMC que tienen injerencia en Vichada

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Imagen de referencia de un
Imagen de referencia de un menor que huyo del reclutamiento forzado. (Crédito: Ejército Nacional)

Dos menores de edad fueron rescatados por el Ejército Nacional el sábado 11 de mayo luego de que estuvieran en poder de una de las estructuras del Estado Mayor Central (EMC), que se considera como la mayor de las disidencias de la extinta guerrilla de las Farc.

Según informaron en un comunicado, las víctimas de reclutamiento forzada fueron halladas en zona rural del municipio de Cumaribo (Vichada), luego de que se reportara que se los llevaron en contra de su voluntad el mes pasado.

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“Aparentemente habían sido llevados en contra de su voluntad el pasado mes de abril por sujetos armados, presuntamente pertenecientes al autodenominado Estado Mayor Central Estructura Primera, en las inmediaciones del sector de Guacamayas. Posteriormente, los uniformaron y les entregaron armamento de largo alcance”, informaron.

No obstante, los menores decidieron escapar de las filas del grupo armado ilegal por los malos tratos que estaban recibiendo por parte de los subversivos.

“En un acto de supervivencia, huyeron hacia una vivienda, desde donde se alertó a la tropa, activando el protocolo establecido para su recuperación, y fueron dejados a disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar”, explicaron en el Ejército.

Añadieron que este acto fue denunciando ante las autoridades judiciales, ya que se trata de una violación del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y de los Derechos Humanos.

“El Ejército Nacional continuará desarrollando operaciones militares para mitigar el accionar delictivo de los grupos armados organizados que operan en la región, con el objetivo de preservar la seguridad y la tranquilidad de la población civil en el Oriente colombiano”, finalizaron el comunicado.

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Menores rescatados en el Meta

Hace dos semanas se reportó otro rescate de tres menores de edad que fueron reclutados forzosamente por otra de las estructuras del EMC.

Los niños viajaban junto a un adulto en una van cuando fueron detenidos en el peaje Pipiral por la Policía, que solicitó al conductor que se detuviera.

Las autoridades descubrieron que los tres menores habían sido “tomados ilegalmente por un grupo al margen de la ley en el Cauca”, hecho que se informó al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) para proceder con el restablecimiento de sus derechos.

“En horas de la madrugada, personal de la seccional de Tránsito y Transporte procedió al ‘alto’ de un vehículo de transporte público, donde viajaban tres menores de edad acompañados por un sujeto mayor de edad”, reportó el coronel Norman Gómez, comandante de la Policía del Meta.

El comandante de la Policía señaló que los niños se dirigían al Guaviare, un detalle crítico para la investigación, ya que podría indicar una intención de utilizar a los menores en conflictos armados por parte del grupo involucrado, aún sin identificar claramente.

“Los menores indicaron que procedían del Cauca y se dirigían hacia el Guaviare. Esto nos permite considerar la posibilidad de un caso de reclutamiento de menores”, enfatizó el comandante de la Policía del Meta.

Luego de su rescate, las autoridades buscaron comunicarse con sus familias para informar sobre su situación, mencionando además que los menores están en buen estado físico y no muestran señales de violencia.

El adulto acompañante fue detenido y puesto a disposición judicial para enfrentar cargos relacionados con el incidente.

El reclutamiento de menores por grupos ilegales ha sido uno de los temas críticos en los debates sobre los diálogos de paz que mantiene el Gobierno con distintas facciones armadas.

El Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric), alertó sobre el reclutamiento de menores indígenas por parte del grupo de Iván Mordisco, implementando “un plan candado” como medida de seguridad en los resguardos, con el apoyo de la guardia indígena, protegiendo así a las niñas de ser incorporadas a estas filas.

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