Grupo criminal La Inmaculada anunció plan pistola por traslado de estos cabecillas a la Dijín

El ministro de Defensa, Iván Velásquez, anunció medidas drásticas para controlar las acciones de organizaciones criminales que operan en el Valle del Cauca, refiriéndose específicamente a la temida banda La Inmaculada, que opera principalmente en Tuluá.

Uno de esos importantes anuncios es el traslado de por lo menos 30 integrantes presos a un centro especial de la Dijín, con el fin de ejercer mayor vigilancia en las actuaciones delincuenciales que se comandan desde distintas cárceles del país.

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“En el municipio de Tuluá, La Inmaculada, sobre lo cual, porque han continuado con sus acciones aun desde las cárceles estos cabecillas, se ha tomado la decisión de recluirlos en la Dijín, donde tendrán todo el control de parte de la Policía Nacional para impedir en esas actividades delictivas (sic)”, afirmó el jefe de cartera, quien agregó que junto con el ministro de Justicia, Néstor Osuna; los directores del Inpec, teniente coronel Daniel Gutiérrez y de la Policía, William Salamanca, habilitaron un pabellón especial en la Colonia Agrícola de Acacías (Meta) para recluirlos.

De acuerdo con lo que pudo conocer El Tiempo, los nombres de los criminales de la mencionada estructura delincuencial que llegarían al centro especializado en los próximos días sería Andrés Felipe Marín, alias Pipe Tuluá, considerado como el líder principal de la organización y a quien se le acusa de ser el autor de los atentados contra la Fuerza Pública, actos sicariales contra funcionarios del Inpec y concejales, en el corazón del Valle.

Alias Pipe Tuluá, junto con su hermano, alias Nacho, Care Gallo, Valentín, Care Vieja, y Juaco, se les señala de delitos relacionados con homicidios, extorsiones y microtráfico, además, de presunto reclutamiento de menores; harían parte del grupo que conformarían con otros 24 delincuentes considerados “como los mayores dinamizadores de extorsiones desde cárceles y que están afectando a comerciantes y ciudadanos del Valle del Cauca”, según el ministro Velásquez.

Preocupados se encuentran trabajadores del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) por el panfleto amenazante de La Oficina de Tuluá, conocida también como La Inmaculada, revelado el viernes 10 de mayo.

Pese a que este grupo criminal fue uno de los que anunció cese de actividades violentas por la celebración del Día de la Madre, anunciaron el regreso de sus ofensivas el lunes 13 de mayo debido a los anuncios del Gobierno nacional, especialmente el relacionado con el traslado de sus principales cabecillas recluidos.

“Nuestra organización informa que a partir del día 13 de mayo del año en curso iniciaremos una campaña de plan pistola contra todos los funcionarios del Inpec, ya que continúan con la opresión y malas decisiones, ya que ahora vemos, según nos van a trasladar a un búnker, continuando con nuestra vulneración de nuestros derechos (sic)”, expresó el panfleto compartido por medios locales, y agregan que van a ejecutar acciones criminales más letales y contra “objetivos de alto valor”.

Por estas amenazas, funcionarios del Inpec expresaron su temor, por lo que hicieron un llamado al Gobierno nacional para avanzar en los diálogos con este grupo delictivo:

“Hay que utilizar el diálogo y la concertación como se ha generado con otras organizaciones delincuenciales para acabar con esta ola de violencia, que empiecen a intermediar y evitar que se sigan presentando homicidios en contra de los funcionarios del Inpec”, declaró Oscar Robayo, presidente de la Unión de Trabajadores Penitenciarios (UTP) a Blu Radio.

Los trabajadores de los centros penitenciarios también solicitaron a los gobiernos locales y departamentales el refuerzo de seguridad en las inmediaciones de las cárceles, recordando los recientes atentados contra dos dragoneantes afuera de los centros de reclusión de Buga y Tuluá, ocurridos simultáneamente el 9 de abril.