Diomedes Díaz es, con sobrados méritos, un ícono de la cultura colombiana. El Cacique de La Junta se ha mantenido atemporal ya sea por la perdurabilidad de sus canciones, la forma en que la inteligencia artificial juega y reinventa su legado en direcciones siempre impredecibles, o las leyendas que rodean su vida.
Una de las más notorias tiene que ver con la gran cantidad de hijos que tuvo a lo largo de su vida. Actualmente son 21 los hijos que llevan su apellido legalmente, pero con el paso de los años surgieron más hijos que el cantante no reconoció en vida. Esta situación dificultó la división de la herencia, pues la notaría responsable tendría que tomar en cuenta una partición distinta de la planificada originalmente.
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De acuerdo con su hijo, el también cantante vallenato Elder Dayán, actualmente habría hasta siete hijos más reclamando por la paternidad del Cacique. Entre ellas se incluye Johanna Bonilla, una mujer que en 2015 apareció en una entrevista con La Red de Caracol Televisión afirmando que era hija del cantante.
Según explicó, supo que era una potencial heredera cuando cumplió la mayoría de edad. “Me enteré cuando tenía 19 años por mi mamá, cuando conocí por casualidad en Barranquilla a uno de mis hermanos y pues ella al escuchar que me había conocido con uno de los hijos de Diomedes no tuvo más que decirme que cuidado que él era mi hermano, que yo era hija de Diomedes Díaz”, narró.
Pese a la revelación, su madre se opuso a que conociera más en profundidad su parentesco con el Cacique. “Yo le decía a mi mamá que por qué no quería que me acercara a ellos y ella me decía ‘no, dónde lo conociste’, ella no se imaginaba que uno tan lejos podría estar tan cerca de ellos en algún momento”, indicó.
Para el momento en que Johanna se decidió a conocer a su papá, Diomedes estaba atravesando un serio problema judicial que marcó su vida y su carrera musical para siempre. “En ese momento ocurrió el problema de él con lo de Doris Adriana Niño. Yo tenía la curiosidad de saber qué le pasó, dónde está, está bien, que no lo fueran a coger preso, en el fondo siempre estuve pendiente de todo lo que le rodeaba y todo lo que le sucedía”, aseguró.
En la entrevista, Johanna señaló que no es la única a la espera de que se confirme la paternidad de Diomedes en ese momento. “Hay conmigo un grupo como de 10, tengo entendido, en un proceso con abogados que se están encargando de realizar las pruebas de ADN a todos”, explicó. Añadió que, si bien, no pudo conocer al que sería su padre biológico, tuvo la oportunidad de ir a Valledupar con regularidad y allí entró en contacto con Patricia Acosta, la esposa del Cacique entre 1978 y 1995.
Sobre cómo su mamá conoció al Papá de los Pollitos, contó que fue después de una presentación del artista. “Tenía mis sospechas porque mi mamá me decía que había tenido algo, una amistad, que eran amigos. Ella andaba con mi papá, para un toque para un 6 de reyes, se fue con él, pero cuando se enteró que andaba con más mujeres se le partió el corazón. Ahí quedó embarazada”, comentó.
En ese orden de ideas, Johanna aclaró que su interés al probar la paternidad de Diomedes no tenía relación con algún interés en tener parte de la herencia que le correspondería. “Para mí el único interés es llevar con orgullo el apellido Díaz, por todo el legado que él dejó, porque eso fue una huella imborrable. Para mí la mayor herencia que tengo de él es la humildad porque lo poco que lo conocí por medio de otras personas, me identifico mucho con él. Soy trabajadora, desinteresada, porque mi papá no era apegado a las cosas”, manifestó.