Aguas termales para relajarse: conozca más de diez lugares cerca de Bogotá para disfrutar un baño terapéutico

Aunque por estos días las palabras racionamiento, sequía y fenómeno de El Niño sean parte del vocabulario de los bogotanos, los oasis de tranquilidad y bienestar de las aguas termales siguen siendo una buena opción para tomar un baño terapéutico mayor a los tres minutos que recomienda la Alcaldía para el uso diario.

Más allá de grandes y vistosos embalses, el centro del país cuenta con fuentes hídricas minerales y termales que tienen provechosos beneficios para quien en ellas se sumerge. Balnearios, piscinas naturales y diseñadas y pequeñas fuentes de lodo son algunos de los manantiales naturales con propiedades curativas que están a los alrededores de la capital.

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Estas fuentes minerales, con temperaturas superiores a los 5°C -consideradas termales frías si están por debajo de los 20 °C- e inferiores a los 50°c se destacan no solo por su capacidad para ofrecer un refugio contra el estrés cotidiano, sino también por sus efectos en la salud que incluyen la eliminación de toxinas, la mejora del sistema inmunológico, y la promoción de una mejor circulación sanguínea. También se han señalado mejorías para afecciones dermatológicas.

Entre los más destacados se encuentran Los Volcanes, Termales El Zipa en Tabio, Termales en Guasca, Termales Nápoles y Termales Santa Mónica, cada uno con características únicas que los hacen idóneos para visitas familiares o escapadas románticas.

Los Volcanes, situado entre los municipios de Machetá y Chocontá, ofrece no solo baños termales, sino también una cámara de vapor natural. Este destino, además, cuenta con infraestructura para el alojamiento y esparcimiento, como restaurantes y senderos ecológicos.

También están los termales El Zipa. Se ubican en el municipio de Tabio y es un destino muy rico en historia, pues se dice que ha servido como lugar de descanso para los caciques chibchas en tiempos precolombinos. Además de las piscinas termales, este lugar ofrece servicios como baño turco y jacuzzi.

Más cerca de Bogotá, a solo 40 minutos, están los termales de Guasca, en los que el viajero podrá aprovechar sus ricas aguas en azufre, que también ofrecen beneficios dermatológicos a sus visitantes, complementando la experiencia con piscinas termales, sauna e hidroterapia.

Termales Nápoles, en Chocontá, destaca por su entorno natural y la posibilidad de disfrutar de lodoterapia y piscinas al aire libre. Este refugio ecológico en el valle de Tenza permite el disfrute de la naturaleza y el bienestar termal en un entorno sostenible.

Finalmente, Termales Santa Mónica, en Choachí, se diferencia no solo por sus aguas medicinales sino también por ser un espacio pet friendly, donde las mascotas son bienvenidas. Allí las aguas emergen a 80 grados centígrados y están en diversas partes de las instalaciones para el disfrute y relajación.

Pero, más allá de estos, inclusive en el departamento de Boyacá, se encuentran otros destinos que tienen fuentes hídricas termales. Un listado de hoteles, clubes y establecimientos turísticos realizado por la reconocida revista Diners, agrupó algunos de los más famosos que se encuentran en el departamento de Boyacá.

• Hotel termales El Batán en Boyacá: a tres horas de Bogotá, ofrece un espacio exclusivo con aguas mineromedicinales y vistas al lago de Tota.

• Paraíso Termal, Tibirita: accesible tras dos horas de viaje desde Bogotá, brinda terapias de lodoterapia y piscinas termales en medio de un ambiente natural.
• Club Dhuchi, La Calera: a solo 15 minutos de la capital, este club propone una escapada rápida a sus visitantes con piscinas termales y una gastronomía variada.

• Malu del río, Guateque, Tibiritá: un destino familiar con opciones de camping y lodoterapia, ideal para una experiencia completa de fin de semana.
• D’Acosta Hotel Sochagota, Paipa: situado frente al lago Sochagota, este hotel propicia un ambiente de relajación con aguas termales y servicios de spa.

Es imprescindible mencionar algunas recomendaciones para quienes buscan disfrutar de estos destinos: consultar con un médico antes de sumergirse en aguas termales en caso de embarazo, enfermedades o tratamientos médicos en curso, especialmente para aquellos con condiciones cardíacas. Además, se aconseja moderar el tiempo de permanencia en las aguas, particularmente en espacios cerrados o de altas temperaturas, para evitar efectos adversos.

Los visitantes deben planificar su traslado, teniendo en cuenta opciones de transporte público y rutas en carro. Los horarios varían por establecimiento, por lo que se recomienda verificar esta información previamente. La experiencia en estos balnearios ofrece una combinación única de relajación, salud, y conexión con el entorno natural.