De forma inesperada, el mayor en retiro del Ejército Juan Carlos Rodríguez, alias ‘Zeus’, acusado por colaborar con grupos paramilitares y hasta con capos del narcotráfico, apareció once días después de que las autoridades anunciaran su fuga de una estación de Policía en Cucúta.
Por medio de una carta dirigida a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el exmilitar que hace parte de esa justicia transicional e implicado en los casos de falsos positivos y crímenes contra la Unión Patriótica, expresó sus temores por la falta de garantías a las que se ha visto expuesto desde que fue aprehendido el pasado 11 de abril transportando un arsenal de guerra.
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De hecho, el presidente Gustavo Petro y el ministro de Defensa, Iván Velásquez, sostuvieron una conferencia de prensa exponiendo la presunta vinculación de Rodríguez con una banda dedicada al hurto de armamento en instalaciones militares.
Por eso, Zeus hizo frente a esa situación presentando un contundente argumento ante la JEP, en el cual alega una serie de violaciones a sus derechos fundamentales durante y posterior a su detención. “Me han violado todos mis derechos fundamentales, en especial el debido proceso y la dignidad”, enfatiza en un documento obtenido por Blu Radio.
Según relata, el día de su captura se encontraba junto a tres personas cuando fueron detenidos por la Policía para una revisión de rutina, momento a partir del cual se desencadenaron los hechos que culminaron en su captura bajo acusaciones que él refuta enérgicamente.
El incidente de captura y los eventos subsecuentes, de acuerdo con Rodríguez, pintan un cuadro de errores procesales y tácticas cuestionables por parte de las autoridades. Describió cómo después de una primera parada por la Policía, se les permitió continuar solo para ser detenidos nuevamente a poca distancia.
Más aún, “fui incomunicado y encerrado... en una acción desbordada, equivocada e ideológica”, afirmó, refiriéndose a las circunstancias que rodearon tanto su detención como la incautación de armas, la cual negó rotundamente.
“En una mentirosa rueda de prensa al día siguiente se dijo luego de unas minuciosas labores de ‘inteligencia´ habían sido incautadas en mi poder, en mi carro, armas, municiones y explosivos. Situación que no es cierta porque ese material de guerra no fue encontrado en mi poder, ni en mi vehículo, ni en mi maleta, ni mucho menos cerca de mí”, señala el documento.
De hecho, el exmilitar dio detalles de su fuga el pasado 21 de abril, asegurando que lo hizo con el único propósito de preservar su integridad física, pues durante la fuga se presentaron hechos violentos como el incendio de colchones que nubló la visibilidad, además de denunciar ataques en su contra en ese instante.
“Realmente no sé qué fue, si una fuga masiva o un plan para matarme, solo sé que me dispararon como en 5 oportunidades a la cabeza, razón por la que sentí un miedo insuperable y corrí para preservar la vida”, reveló el medio nacional.
Además de proclamar su inocencia en cuanto a la posesión del armamento, Rodríguez también destacó la irregularidad en el proceso de su captura y manejo posterior, incluyendo la falta de contacto con su abogada y discrepancias en el informe policial presentado ante el juez de control de garantías.
Señalando una grave preocupación por su seguridad y la de su familia, solicitó la intervención de la JEP para una investigación y adecuada consideración de su caso, pues siente que los operativos para dar con su captura tendría un fin distinto al de responder ante la justicia. “La Policía ofrece 50 millones supuestamente para capturarme, pero lo que realmente va a pasar es que me van a asesinar para que no declare en la JEP”, señaló.
Finalmente, alias Zeus reiteró su compromiso con la justicia transicional ante la noticia de la apertura de un proceso sancionatorio por violar los acuerdos de la JEP, aunque señaló que no se entregará a las autoridades por temor. “Estoy a su disposición y estoy en la capacidad de declarar en forma virtual porque por temor a perder mi vida me da miedo hacer cualquier movimiento”, concluyó-.