La extorsión es uno de los delitos que más se cometen en Barranquilla, principalmente por las tres estructuras delincuenciales que tienen el control de las rentas ilícitas en la ciudad: los Pepes, Rastrojos Costeños y Los Costeños.
Ese último grupo delincuencial tiene azotados los sectores de Buenos Aires y La Magdalena, donde varios residentes han denunciado una nueva modalidad de extorsión que tiene que ver con el lujo o estatus social que aparenten las viviendas.
Según pudo conocer el medio barranquillero El Heraldo, hombres en moto entran a los barrios mencionados, les hacen inteligencia y seleccionan las que tengan acabados de alta calidad en su fachada, les toman fotos y posteriormente dejar panfletos que exigen grandes sumas de dinero a cambio de no agredir a los propietarios.
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“Eso viene sucediendo desde el lunes de la semana anterior (entre el 21 y 28 de abril), cuando sujetos en moto llegaron a la vivienda de mi hermana. Llegaron a eso de las 12 del mediodía cuando hay poco movimiento de personas. Posteriormente, solicitaron la suma de dinero que estaba en los panfletos”, le dijo al medio citado el hermano de una víctima de los extorsionistas.
De acuerdo con las denuncias, los delincuentes de los Costeños exigen como primer pago una suma de diez millones de pesos, seguido de pagos semanales de 100 mil pesos para “colaborar con la causa”.
Los hechos tuvieron lugar a mediados de agosto y desde entonces aumentó la presencia de motorizados desconocidos en los sectores de Buenos Aires y La Magdalena, y en el caso denunciado, la intimidación escaló hasta un enfrentamiento armado cuando trató de repeler a uno de los extorsionadores que visitó la casa de la víctima.
“Ya en la tercera ocasión que regresaron a la casa, me encontraba yo. Uno de los individuos se percata del arma de fuego que yo portaba, de inmediato emprende la huida y alcanzo a dispararle. Este me devuelve el tiro e intento seguirlo, pero terminó yéndose con su acompañante en la moto”, narró el denunciante.
La preocupación por este tipo de delitos no es nueva en Barranquilla, pues en años anteriores los criminales tenían comportamientos similares con establecimientos comerciales, incluso balearon varias discotecas, bares y estaciones de gasolina, incluso, los extorsionistas de los Costeños asesinaron al trabajador de una de las ‘bombas’ de combustible en represalia por el no pago de extorsiones.
Para enfrentar esta situación, el mayor Alirio Acuña, jefe del Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (Gaula) de la Policía Metropolitana de Barranquilla, hizo un llamado a la población a denunciar estos incidentes.
“Suministren toda la información posible. Hay un 55 % de incremento en el número de capturas y eso es gracias a las denuncias a través de la línea 165 del Gaula”, aseveró el oficial de la Policía.
La policía continúa con las investigaciones para identificar y capturar a los responsables de esta nueva modalidad de extorsión, reforzando la seguridad en los sectores afectados y garantizando la protección de sus residentes.
En el desarrollo de acciones de las autoridades contra la extorsión fue capturado alias Iván de la Rosa, un extorsionista de los Costeños que cargaba consigo panfletos amenazantes y una granada, elementos que usaba para intimidar a sus víctimas al momento de los cobros extorsivos.
“Al momento de la captura, alias Iván de la Rosa tenía en su poder una granada de fragmentación, motivo por el cual fue dejado a disposición de la Fiscalía por el delito de fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios de uso privativo de las Fuerzas Militares”, dijo la Policía tras la captura del criminal.
De acuerdo con las autoridades, el delincuente capturado tendría una trayectoria criminal de siete años y estaba a cargo de la dinamización de homicidios en distintos sectores de Barranquilla, tráfico de estupefacientes y la extorsión.