Qué pasó con el helicóptero que se accidentó con nueve militares a bordo: el comandante de las Fuerzas Militares dio explicaciones

La caída del helicóptero militar ruso MI-17 en el sur de Bolívar durante la tarde del lunes 29 de abril, que dejó un saldo de nueve militares fallecidos, incluyendo un teniente coronel que pilotaba la aeronave, reabrió el debate sobre la falta de mantenimiento que estarían presentando las aeronaves de las Fuerzas Militares.

Sin embargo, el comandante de las Fuerzas Militares, general Helder Giraldo, aseguró que el helicóptero se encontraba en “óptimas condiciones” para volar, pese a las especulaciones sobre fallas mecánicas debido a la falta de repuestos por la situación bélica entre Rusia y Ucrania.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

En cuanto a las causas del accidente, el comandante señaló que “las malas condiciones meteorológicas” podrían haber afectado el curso de la aeronave, aunque admitió que las investigaciones también intentan descartar, o comprobar, otras posibilidades externas.

“Lo sucedido en el día de ayer es materia de investigación por un cuerpo especial de investigación para el caso de este tipo de siniestros. No sabemos cuáles hayan podido ser las fallas. Lo que sí conocemos es que las malas condiciones meteorológicas del día de ayer pudo haber sido una de las causas”, comentó Giraldo.

El general también hizo énfasis en que la misión del helicóptero era de carga, apoyando operaciones contra el Clan del Golfo, además de resaltar la experticia del uniformado que pilotaba el helicóptero en el momento que ocurrió el accidente.

“Desde que se creó la aviación del Ejército han volado más de 740 mil horas. Circunstancias difíciles en apoyo a las operaciones militares, pero manteniendo el cumplimiento de esa misión de manera cabal”, concluyó el comandante.

Este lamentable evento se suma a una serie de tragedias que han afectado a la aviación militar del país. El Ejército de Colombia, dirigido por el general Luis Ospina, ha registrado cuatro accidentes aéreos recientes, alimentando la hipótesis de posibles complicaciones en la gestión y mantenimiento de su flota aérea.

De hecho, se ha destacado que el helicóptero accidentado formaba parte de un grupo de aeronaves que debían ser enviadas a Rusia para su mantenimiento después de haber cumplido 20,000 horas de vuelo, un procedimiento que no se llevó a cabo.

Entretanto, la recuperación de los cuerpos de los militares fallecidos ha sido complicada por las condiciones climáticas adversas en el lugar del accidente, un terreno boscoso de difícil acceso. Según el general Giraldo, se está a la espera de una mejora en el clima para que el CTI de la Fiscalía, junto con la ayuda de la fuerza pública y organismos de socorro, puedan proceder con el levantamiento de los cuerpos.

Sin embargo, el accidente ocurrido en la tarde del lunes no solo ha traído a la luz el riesgo inminente de las operaciones militares aéreas, sino que también ha resaltado la crisis de mantenimiento y repuestos que enfrenta la flota de equipo ruso del Ejército Colombiano, una situación exacerbada por la retención de algunas aeronaves en lo que la institución denomina un estado de “preservación técnica” debido a que han alcanzado su límite de horas de vuelo sin recibir el mantenimiento requerido.

Por su parte, la tragedia aérea ha resonado no solo en los círculos militares sino en toda la nación. El general Giraldo ha extendido sus condolencias a los familiares de los militares fallecidos, mostrando la solidaridad de las Fuerzas Militares y del país con las víctimas de este desafortunado evento.

El devastador incidente que sacudió el sur de Bolívar, cuando un helicóptero del Ejército Nacional se estrelló y causó la trágica muerte de nueve militares, intensificó las preocupaciones sobre la seguridad de las aeronaves de fabricación rusa, especialmente por las dudas en torno a su adecuado mantenimiento.

Este reciente accidente se suma a una serie de eventos que han involucrado a helicópteros rusos en el país. De hecho, en los últimos catorce meses se han reportado aproximadamente cinco accidentes, con un saldo total de 21 personas fallecidas.

Estos trágicos eventos han ocurrido a pesar del presupuesto asignado al mantenimiento de estas aeronaves, cifra que asciende a 118 mil millones de pesos, despertando cuestionamientos sobre el uso de estos recursos.

Julio César Triana, representante a la Cámara por Cambio Radical, ha sido una voz crítica frente a esta situación, exigiendo explicaciones detalladas al Gobierno sobre las medidas de prevención y mantenimiento adoptadas. El debate se centra no solo en la seguridad de las tripulaciones y las aeronaves sino también en la transparencia y la gestión de los fondos destinados para tal fin.