Dos décadas de la tragedia ‘21 ángeles’ en Bogotá: esta es la historia de cómo sobrevivió Juan Daniel

El accidente del Agustiniano Norte tuvo una persona que se salvó y recientemente contó detalles de lo que sucedió en ese momento

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La tragedia de 21 Ángeles ocurrida en 2004 tuvo un sobreviviente - crédito Wikimedia
La tragedia de 21 Ángeles ocurrida en 2004 tuvo un sobreviviente - crédito Wikimedia

El pasado 28 de abril de 2004, un miércoles, sucedió uno de los accidentes de tránsito más dolorosos para la capital de Colombia y también de las tragedias más graves en la historia del país.

Se trata de ‘21 Ángeles’, un hecho que quedó nombrado así porque se llevó la vida de 21 menores cuando una ruta del colegio Agustiniano Norte fue aplastada por una máquina trituradora de asfalto. El accidente también dejó a dos adultos fallecidos, de 24 personas heridas en total.

Este lamentable suceso ocurrió exactamente en la curva de la calle 138 con avenida Suba, al cual después del suceso llamaron ‘21 Ángeles’, en honor a las víctimas que, en su mayoría, eran alumnos de la primaria de la institución mencionada.

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Así fue el accidente que acabó con la vida de 21 menores y 2 adultos en Bogotá en el año 2004 - crédito AFP
Así fue el accidente que acabó con la vida de 21 menores y 2 adultos en Bogotá en el año 2004 - crédito AFP

Ya son 20 años los que han pasado después del lamentable episodio, y a propósito de la fecha el programa de Tropicana llamado Entre Valientes, tuvo la oportunidad de entrevistar al sobreviviente que dejó la tragedia.

Juan Daniel, quien en ese momento tenía 7 años, actualmente ya es todo un adulto y recuerda que ese 28 de abril de 2004 los alumnos acudieron al colegio de particular y fue una jornada tranquila, pero todo cambió cuando en un día común y corriente los niños abordaron la ruta para regresar a sus casas.

De acuerdo con las declaraciones del joven, hay una par de escenas que no olvida en lo absoluto, como por ejemplo, que la monitora habitual de la ruta no pudo asistir ese día a su trabajo, pero su hijo sí estaba en ella.

Ese muchacho murió y le había pedido a ‘Lala’ [sobrenombre de la monitora de la ruta] que, si le daba permiso de irse con los amigos y de no ir en la ruta, pero ‘Lala’ le dijo que no y lo mandó a subirse en la ruta”, empezó contando Juan Daniel.

Otra de las memorias claras que tiene el joven sobre ese día y de lo que pasó es que él cursaba primero de primaria cuando ocurrió la tragedia y recuerda que el día exacto del accidente estaba sentado en la mitad de la ruta hacia la parte de atrás junto al que era su mejor amigo.

“Yo iba como dispuesto a dormirme con las piernas recogidas. Yo estaba en el costado derecho al lado de la pared del bus, ya me estaba quedando dormido cuando ocurrió el accidente”, reveló.

Juan Daniel es el sobreviviente que dejó la tragedia 21 Ángeles en Bogotá - crédito captura pantalla podcast 'Entre Valientes'
Juan Daniel es el sobreviviente que dejó la tragedia 21 Ángeles en Bogotá - crédito captura pantalla podcast 'Entre Valientes'

El recorrido de los menores era desde ese colegio hacia la localidad de Suba y en el camino fue cuando cayó la retroexcavadora sobre el bus. Aunque fueron 21 pequeños los que perdieron la vida en el lugar, milagrosamente Juan Daniel se convirtió en el sobreviviente del impacto.

Según explicó Daniel, en el momento en que se dio el choque, él quedó colgando de su pierna, ya que quedó atrapada entre la máquina y parte de la pared del bus, donde estaba recostado cuando iba a dormirse.

Cuando pudo percatarse, su mejor amiguito, Juan Pablo, no había corrido con la misma suerte y falleció por el impacto, pues Daniel recuerda que lo vio moviendo las piernas y lo escuchaba gritar, porque al parecer, había quedado atrapado del cuello, todo esto sucedió durante algunos segundos, pero rápidamente dejó de hacerlo y fue ahí cuando Juan Daniel entendió que su compañero había muerto.

Recuerdo que como yo estaba colgado, no tocaba ni el piso. Sentía como agua densa y tenía toda la mano manchada de sangre. Quise romper la ventana y de allí sentía el oxígeno, pero además sentía la algarabía del exterior. El cuerpo entró en un estado de querer guardar cualquier pisca de energía, estaba choqueado”, reveló.

El joven aseguró que la dimensión del accidente fue tan grave que tiene muchas lagunas del momento porque se iba y regresaba, sin embargo, no olvida que había muchas personas gritando y un compañero en el fondo le daba ánimo.

Finalmente, llegó al médico con las afectaciones físicas que tuvo, pues tenía su pierna derecha destruida y un injerto de la izquierda por la perdida de carne que tuvo con la extremidad más afectada. Su ojo izquierdo estaba totalmente inflamado y la cabeza también.

Estuvo seis meses en un hospital y los siguientes seis en recuperación en casa, tuvo psicólogo y mucho acompañamiento. En su juventud se vio involucrado en temas de drogas y malas amistades, pero encontró el camino de salida cuando se pegó a Dios.

Actualmente, se dedica al arte y vive en Miami, su accidente unió a sus papás y recuperaron su matrimonio, estuvieron juntos hasta hace 5 años que el señor falleció.

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