Son varias las alertas que hay en Colombia por la aprobación del proyecto de reforma pensional del Gobierno de Gustavo Petro en el Senado de la República. El mismo, ahora será debatido en la Cámara de Representantes y, en caso de ser aprobado, pasará a conciliación y luego a sanción presidencial.
Entre lo aprobado está el artículo 84, que establece el tratamiento tributario de las pensiones y dice que estarán exentos del impuesto sobre la renta y complementarios todas las pensiones, incluyendo las que perciban los residentes colombianos provenientes del exterior, mientras que estarán gravadas solo en la parte que exceda de 1.000 unidades de valor tributaria -UVT-, ($47.065.000 anuales o $3.600.000 mensuales, teniendo en cuenta que la UVT actual es de $47.065 y que los pensionados reciben 13 pagos al año).
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Tal es la controversia que el exdirector de la Dian Lisandro Junco anotó que “están metiendo una reforma tributaria con la pensional. PENSIONADOS van a pagar renta”.
Explicó que “hoy deben pagar renta las pensiones mensuales superiores a $47 millones. El cambio en la pensional es que pagarán renta las pensiones mensuales a partir de $3,6 millones. Claramente, una burla al Congreso, que debe tramitar estos debates por Comisión Tercera y Cuarta”.
Costo de vida
El presidente de la Federación Nacional de Comerciantes Empresarios (Fenalco), Jaime Cabal, manifestó su preocupación por el intento de gravar las pensiones de los adultos mayores que viven de una pensión y que, adicionalmente, requieren poder tener un mayor alcance en el consumo por el costo de vida, ya que una pensión no es indexada por el incremento del salario mínimo, sino con el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Aseguró que gravar con el impuesto sobre la renta a las pensiones superiores a los $3.600.000 equivale a cobrar un impuesto que ya pagaron los colombianos por medio del impuesto sobre la renta que incluye a los salarios.
“Con los impuestos sobre las pensiones, los adultos mayores pensionados recibirán menos dinero cada mes para entregar una parte de su mesada al Gobierno. Esta propuesta empobrece a los adultos mayores, reduce su poder adquisitivo, su bienestar y afecta, además, el consumo, incluso de bienes de la canasta familiar”, afirmó el dirigente gremial.
Reforma tributaria dentro de la reforma pensional
Jaime Cabal enfatizó en que no se puede ocultar una reforma tributaria dentro de una reforma pensional, a todas luces nociva para los ahorros de los colombianos.
“Los adultos mayores trabajaron toda la vida, pagando impuestos y haciendo cumplidamente aportes para disfrutar de una pensión. No es justo que ahora se pretenda crear un impuesto adicional a estas pensiones”, agregó.
Por último, el funcionario señaló que “este artículo de la reforma pensional es inconstitucional porque viola el principio de unidad de materia al llevar una disposición tributaria al articulado de la reforma pensional (artículo 158 de la constitución) y, dado que este proyecto tuvo origen en el Senado, también se incumple el deber de dar inicio a los proyectos de ley sobre tributos en la Cámara de Representantes (artículo 154 de la constitución)”.
Gravamen no sería generalizado
El abogado Diego Torres, asociado principal del despacho de abogados Cuatrecasas, aclaró que aunque las propuestas para gravar las pensiones no son nuevas, la aplicación de una tarifa marginal del 0% hasta por $4.200.000 mensuales deja entrever que no todos los pensionados estarían sujetos a este impuesto. La reforma tributaria reciente planteó un umbral que, de ser superado, implicaría un cambio en la carga impositiva para ciertos jubilados.
Torres dijo a El Tiempo que, bajo el sistema actual, “una persona que únicamente tiene ingresos por pensiones, tendría que tener ingresos mensuales de alrededor de $8.000.000 para que, una vez restada la exención de 1.000 UVT anuales, se sitúe en un rango gravable”.
Esta explicación sugiere que la afectación no sería generalizada, sino que aplicaría de manera gradual según los ingresos del pensionado. Este detalle es muy importante, si se considera que la reforma tributaria buscaba inicialmente gravar pensiones superiores a $10.000.000 mensuales, una medida que no prosperó.
Además, la manera de calcular el impuesto sobre la renta permitiría que, incluso cuando se aplique la tarifa impositiva, “si al pensionado que recibe $8.000.000 al mes se le resta la renta exenta de $3.600.000, quedarían unos $4.400.000 sujetos a ser gravados”.